Las diferencias de la calima con otros fenómenos como la niebla o la bruma

Los cielos de media España han tintado estos días de un efecto anaranjado propio de Marte. Gruesas capas de arena sobre las superficies e incluso sobrecogedoras 'lluvias de sangre' ,están convirtiendo nuestros escenarios en paisajes de ficción. La posición del sistema al suroeste de la Península, y su circulación ciclónica asociada han provocado el ascenso de una considerable masa de polvo sahariano. Por ello, son muchas las personas que habrán observado este fenómeno por primera vez, al menos con esta intensidad. Vamos a hablar de los principales fenómenos que son parecidos a la calima y que suelen confundirse con alta frecuencia. En este sentido, existen gran cantidad de términos referentes a la climatología: niebla, neblina,bruma... son conceptos meteorológicos parecidos, aunque hay diferencias.

Calima

La calima es un fenómeno meteorológico que se produce en la atmósfera y está caracterizado por la presencia de partículas de polvo y arena, e incluso en algunas ocasiones de cenizas y arcilla en suspensión. De esta forma, también reduce la visibilidad al igual que la niebla El resultado es un ambiente turbio.

Las PM10 se pueden definir como aquellas partículas sólidas o líquidas de polvo, cenizas, hollín, partículas metálicas, cemento o polen, dispersas en la atmósfera, y cuyo diámetro varía entre 2,5 y 10 µm (1 micrómetro corresponde la milésima parte de 1 milímetro). Se debe tener en cuenta que las partículas que miden menos de diez micras entran a nuestro organismo a través de las vías respiratorias llegando al pulmón y, por tanto, al riego sanguíneo.

Existen dos tipos de calima en función del origen de esas partículas. La calima que está esta semana en los cielos españoles es la calima de tipo 'A' o calima 'natural' que se produce a partir del transporte de arena, sales del agua (sodio) u otros elementos presentes el ambiente. La segunda es la ocasionada por 'eventos especiales' como la contaminación o los efectos forestales.

En España, la calima es bastante frecuente en invierno. Sobre todo, nos la encontramos en las Canarias, concretamente en Lanzarote y Fuerteventura. Este fenómeno tiene lugar a causa de las direcciones en las que sopla el viento. Cuando sopla con dirección oeste, arrastra todo el polvo del desierto del Sáhara hasta el archipiélago, provocando que la visibilidad se reduzca considerablemente y sea peligroso respirarlo. Además, los coches aparecen llenos de barro.

BRUMA

Bruma es un fenómeno atmosférico que hace referencia a la niebla que se forma sobre el mar. También, bruma es el entubamiento de aire próximo al suelo originando gotas acuosas, sales y polvos industriales y naturales lo cual limitan la visibilidad. Es más frecuente en áreas marinas.

La composición de la bruma es núcleos higroscópicos y agua, a diferencia de la niebla común, que solamente consta de agua, y de la calima, que se forma de partículas secas. La neblina o bruma es una clase de niebla, y se distingue de las demás por su nivel de humedad, el cual debe igualar o superar el 70%, lo cual deriva en un marcado descenso de la visibilidad aunque es superior a 1 kilómetro. En este sentido, tanto la calima como la bruma dificultan la visibilidad. La diferencia está en que una produce sequedad en el ambiente y calor (la calima) y la otra, humedad (la bruma).

NIEBLA

Las neblinas y las brumas hacen visibles los rayos de sol, en cambio, la niebla, debido a su alta densidad, no. La niebla es la suspensión en el aire de gotas muy pequeñas de agua, habitualmente microscópicas, que generalmente reducen la visibilidad horizontal a menos de un kilómetro, explica la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET). Si la visibilidad es inferior a 200 metros se considera niebla espesa. En cambio, si las gotitas no reducen la visibilidad horizontal a menos de un kilómetro se considera neblina, según la Organización Meteorológica Mundial.

Mientras que en la bruma y la niebla son partículas de agua condensadas formando nubes, en la calima son motas de polvo, arena, cenizas e incluso arcilla.