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Clotrimazol es un medicamento antifúngico, es decir que se usa para combatir las infecciones por hongos y levaduras. Se trata de una antifúngico de amplio espectro del grupo de los imidazoles. Según establecen desde Medlineplus su acción consiste en detener el crecimiento de los hongos que producen la infección.
Este medicamento puede recetarse para distintos tipos de infecciones por hongos. En algunos casos se podrá usar para el tratamiento para el pie de atleta o la tiña, mientras que también puede encontrarse en geles o comprimidos dirigidos al tratamiento de infecciones vaginales producidas por, entre otros, el hongo Candida.
Según Medlineplus, este principio activo puede usarse para el tratamiento de tiña corporal, tinea cruris y pie de atleta. Su médico o el propio producto le indicará cuántas veces al día deberá usar la crema y cuánto tiempo deberá aplicarla.
Para aplicar el medicamento se debe lavar y secar la zona infectada, para luego pasar a usar una pequeña cantidad de la crema o líquido. En el caso del pie de atleta se recomienda prestar especial atención entre los dedos del pie y usar zapatos que permitan la circulación del aire.
Algunos de los efectos adversos que puede producir este antifúngico son: ampollas, enrojecimiento, inflamación, picazón, urticaria, ardor, escozor y grietas en la piel. En otras ocasiones pueden darse casos de síncope, hipotensión y disnea.
Este medicamento puede recetarse en forma de crema o de comprimido que se introduce en la vagina o se aplica en el exterior en casos de infección por hongos como son las infecciones por dermatofitos, la candidiasis vulvovaginal, la Pityriasis versicolor o en casos de balanitis candidiásica. Su médico le indicará cuándo y cómo ha de aplicarse el producto, aunque si es de venta libre, puede consultarse en el propio prospecto.
Durante el tratamiento se recomienda no tener relaciones vaginales ni usar productos como los tampones. También está contraindicado el uso de duchas vaginales.
Las cremas intravaginales tienen un aplicador especial y las instrucciones de uso detalladas que se pueden encontrar en la caja, junto al producto. En el caso de los comprimidos intravaginales, también se podrán encontrar las instrucciones de aplicación en el prospecto.
Estos medicamentos también pueden producir efectos adversos en algunas personas. Entre los listados se encuentran: reacción anafiláctica, hipersensibilidad, síncope, hipotensión, disnea, dolor abdominal y náuseas. También pueden darse casos de erupciones y urticarias, descamación vaginal, flujo vaginal, dolor vaginal, sensación de quemazón, irritación, hemorragia vaginal, entre otras.
La información más completa sobre los efectos adversos del medicamento podrán encontrarse en el prospecto del mismo.
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