Calor y ropa interior húmeda: la solución de la SEFAP para una combinación que aumenta el riesgo de cistitis de mujeres en verano

La cistitis es una inflamación de la vejiga, generalmente causada por una infección bacteriana y puede producir dolor al orinar, necesidad frecuente de hacerlo y dolor en la parte inferior del abdomen. Aunque puede afectar a cualquiera, es más común en mujeres debido a la anatomía del tracto urinario ya que la uretra femenina es más corta, lo que facilita el acceso de las bacterias a la vejiga. Además, de otros factores como el uso de ropa ajustada o el ciclo menstrual.

Esta enfermedad puede desarrollarse debido a diferenetes factores ambientales, principalmente aquellos en los que predomina la humedad y altas temperaturas. Por eso, es más común que la cistitis aparezca más en verano ya que el calor puede causar un aumento de la transpiración, lo que crea un ambiente húmedo en la piel y las áreas genitales. Esta humedad, combinada con una temperatura elevada, incentiva el crecimiento de bacterias, aumentando el riesgo de infecciones urinarias como la cistitis.

Medidas preventivas

La vocal y miembro del Comité de Pacientes y Ciudadanía de la Sociedad Española de Farmacéuticos de Atención Primaria (SEFAP), Raquel Prieto Sánchez, asegura que para prevenir los casos de cistitis en el verano es importante que tanto la ropa interior como el bañador estén secos en todo momento.

"Además, para evitar las infecciones de orina en las mujeres es muy importante recordar que debemos limpiarnos desde la vagina hacia el ano y no al revés, beber suficiente agua y orinar con frecuencia, cada dos o tres horas, y siempre después de mantener relaciones sexuales", según advierte Prieto, quien ha indicado evitar el uso de espermicidas como método anticonceptivo ya que aumenta el riesgo de infecciones, además de cambiarse los tampones y compresas con frecuencia.

En definitiva, una de las mejores medidas preventivas en climas cálidos, como los que tenemos en Andalucía, es mantener una buena higiene y cambiarse de ropa interior con frecuencia y que esta esté fabricada con materiales que absorban la humedad y permitan la ventilación.

Recomendaciones de la SEFAP

A parte de las medidas higiénicas, una de las prácticas que mejor ayudan a combatir la cistitis, según destaca la vocal de la SEFAP, es la de beber por lo menos un litro y medio de agua al día "para favorecer la eliminación de las bacterias" y ha recordado que "no todas las infecciones de orina necesitan un tratamiento con antibióticos, sino que debe ser el médico quien tome la decisión". Así que medicarte por tu cuenta, no es una solución para la experta.

Beber suficiente agua es esencial para mantener el tracto urinario limpio y libre de bacterias ya que una buena hidratación ayuda a diluir la orina y facilita la eliminación de bacterias del cuerpo, reduciendo el riesgo de cistitis. La ingesta de agua también puede ser a través de los alimentos como los ricos en antioxidantes y vitamina C que encontramos en frutas como los arándanos y las naranjas. Otros como el café, el alcohol y las comidas picantes son más conveniente dejarlos de lado.

Tratamiento para la cistitis

Aunque la mayoría de cistitis en mujeres que están sanas no son graves, Prieto recomienda acudir al médico cuando se tengan los síntomas que indican que podrías tener cistitis. "Esa consulta deber ser urgente si estos síntomas se acompañan, además, de fiebre y de dolor en la espalda baja o los riñones, ya que si la infección alcanza los riñones se convierte en una infección grave que se denomina pielonefritis, y necesitará de un tratamiento específico con antibiótico", ha comentado la farmacéutica. En el caso de que estos síntomas también se presenten en embarazadas, en pacientes muy mayores o en hombres hay que acudir al médico con urgencia

El tratamiento de la cistitis generalmente incluye antibióticos para eliminar la infección bacteriana o analgésicos que alivien el dolor y el malestar, pero esa decisión solamente la puede tomar el médica, así como también su correspondiente prescripción en el caso de que la infección así lo demande y el facultativo necesite asegurarse de que la bacteria se ha eliminado de tu cuerpo por completo.