Los virus que causan las afecciones respiratorias más comunes en invierno y cómo tratarlos desde casa
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Resfriados, gripes, neumonías, bronquiolitis, laringitis,...; las afecciones invernales tienen nombre propio y se pasean con más fuerza e influencia que nunca entre la población. La bajada de temperaturas, la humedad y el fin de las restricciones que manteníamos para combatir el coronavirus, aumentan el riesgo de contraer una infección respiratoria al darse el caldo de cultivo perfecto para que proliferen bacterias y virus. Las infecciones respiratorias infecciones respiratoriassuponen en invierno más de un tercio de las consultas pediátricas tanto en atención primaria como en las urgencias, y suponen un crecimiento en la incidencia de ingresos. Por ejemplo, en el caso de la bronquiolitis, los ingresos crecieron un 74% en una semana. Los más vulnerables, niños y ancianos.
En algunos casos, estas afecciones pueden complicarse, pero en la mayoría pueden tratarse desde casa incluso con remedios naturales que alivian los síntomas. Te explicamos qué tipo de virus causa cada una de estas afecciones y cómo combatirlas.
Adenovirus
Los adenovirus son un grupo de virus muy contagiosos que causan diferentes enfermedades respiratorias como resfriados, crup, bronquiolitis o neumonía. Al igual que la mayoría de estos virus, se transmite por gotitas de saliva, secreción nasal o por contacto con objetos contaminados.
La infección por un adenovirus suele cursar síntomas como fiebre alta, secreción nasal o congestión, dolor de garganta y en algunos casos, sobre todo en niños, pueden desarrollar una infección de oído y conjuntivitis. Asimismo, puede causar infección en el estómago y el tracto gastrointestinal. Esto puede provocar diarrea, calambres abdominales y otros síntomas de gastroenteritis.
Para tratarlo desde casa lo primero que debes hacer es beber suficientes líquidos, tratar la congestión nasal con soluciones salinas o suero y reposar. Dependiendo de la afección que se haya desarrollado también pueden ser útiles la miel, el propóleo o una infusión de jengibre. En el caso de los bebés también son efectivos los remedios a base de aceites esenciales para reforzar su sistema inmune y favorecer la respiración.
Influenza
El virus de la influenza es uno de nuestros fieles acompañantes cada temporada invernal y de los más comunes entre la población ya que es el que causa la popular gripe. gripe.Se caracteriza por iniciarse de manera súbita, con síntomas como fiebre, dolor de todo el cuerpo (mialgias) y habitualmente dolor de cabeza.
Por lo general, la enfermedad desaparece por sí sola después de unos días. Sin embargo, algunas condiciones pueden empeorar y provocar neumonía grave y otras complicaciones. Normalmente, esto sucede en niños y adultos mayores. Lo más recomendable, más aún desde la aparición del coronavirus, es la vacunación anual.
Sus síntomas pueden prolongarse hasta una semana y suelen ser molestos y, en los primeros días, invalidantes. Para reducir su impacto y mejorar el bienestar, existen remedios de toda la vida que pueden ayudar. Entre ellos, tomar té de limón, equinácea, sauco, tilo o ajo puede ser efectivo debido a las propiedades antiinflamatorias de estas plantas. Asimismo, la ingesta de líquidos para promover el movimiento de las secreciones, la vitamina C para reforzar el sistema inmune,agregar aceite esencial de menta o eucalipto o tomar una infusión de jenjibre.
Parainfluenza
Hay cuatro tipos de virus parainfluenza. Todos estos pueden causar infecciones del tracto respiratorio inferior en adultos y niños. El tipo 4 revela reactividad antigénica cruzada con el virus de la parotiditis y es una causa infrecuente de enfermedad respiratoria que requiere atención médica. El virus puede causar crup, bronquiolitis, bronquitis y ciertos tipos de neumonía. El 3, según indican desde MSD Manuals ''puede causar neumonía y bronquiolitis en lactantes pequeños y en niños y adultos inmunocomprometidos.''
Los síntomas cursan tos áspera, respiración rápida, ruidosa o dificultosa, ronquera y sibilancia, enrojecimiento de los ojos, secreción nasal, fiebre o falta de apetito. Como hemos dicho, normalmente, la mayoría de las infecciones causadas por la parainfluenza no necesita un tratamiento específico aparte de aliviar los síntomas. En casos leves, los lavados nasales, las vitaminas (C), aceites esenciales y sopas calientes con hierbas, pueden ayudar a aliviar los síntomas y reforzar la respuesta inmune.
Rinovirus
El rinovirus es el agente causal más común de las infecciones respiratorias de vías altas tanto en niños como en adultos. Las infecciones por rinovirus causan el resfriado común y otras afecciones como faringitis, infecciones de oído e infecciones sinusales/sinusitis. Para su tratamiento lo indicado es tomar mucho líquido, evitar exposición a cambios de temperatura bruscos y reposar.
Para tratar sus síntomas desde casa, aunque no suelen cursar síntomas graves ni muy molestos, el agua, los caldos, los zumos o el agua tibia con limón y miel ayudan a aflojar la congestión y previenen la deshidratación. El ajo, el jengibre y el eucalipto, también son antisépticos y pueden ayudar a despejar la mucosidad y el dolor de garganta.
Virus respiratorio sincicial
El VRS VRS es una de las primeras causas de infección respiratoria aguda baja, cuya circulación es más prevalente entre los meses de otoño e invierno. Es el virus que causa infecciones de los pulmones y en el aparato respiratorio y el más común entre los niños, aunque está empezando a ser una causa importante de problemas respiratorios en ancianos. Normalmente, causa un resfriado que puede ir seguido de bronquiolitis o neumonía.
Los síntomas más comunes son: nariz congestionada o que gotea, tos seca, fiebre baja, dolor de garganta, estornudos, sibilancias o dolor de cabeza. En los bebés muy pequeños, los únicos síntomas podrían ser irritabilidad, menor actividad y dificultad para respirar. Para mejorar los síntomas, humidificar el aire para evitar entornos secos, beber infusiones, las gotas nasales de solución salina para reducir la congestión o plantas como la milenrama.
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