Esta es la actividad física que puedes practicar si tienes dolores de espalda por exceso de carga muscular
Investigación y Tecnología
Actualmente, es reconocido por su capacidad para trabajar los músculos de manera integral
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El dolor de espalda es uno de los problemas de salud más comunes de la sociedad actual. Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), aproximadamente el 80% de la población experimentará algún episodio de dolor de espalda a lo largo de su vida, un malestar que puede deberse a causas como el sedentarismo, las malas posturas, el estrés o el sobrepeso.
Por otra parte, también influye el sector laboral al que nos dediquemos, de tal manera que las personas que pasan largas horas delante del ordenador, las que cargan con objetos pesados y lo hacen de manera incorrecta o, simplemente, la realización de movimientos mecanizados en los que no prestamos atención a la higiene postural. La buena noticia es que existen formas de aliviar y prevenir este problema, pero hay que ser constantes ya que, en este caso, hablamos de la realización de prácticas como el pilates. Es una de las disciplinas más efectivas que hay en la actualidad para fortalecer nuestra musculatura y con la que mejoramos la salud de nuestra espalda. Este método no solo ayuda a reducir el dolor, sino que también contribuye a prevenirlo a largo plazo.
El pilates es un sistema de ejercicios desarrollado a principios del siglo XX por Joseph Pilates, quien lo concibió como un método para mejorar nuestra condición física y mental. Actualmente, es reconocido por su capacidad para trabajar los músculos de manera integral, fortaleciendo especialmente la zona del core, que comprende la musculatura abdominal, lumbar, la zona de la pelvis y del diafragama.
Equilibrio, estabilidad y soporte de la columna vertebral
El beneficio principal que conseguimos para nuestra espalda con la práctica de pilates es el fortalecimiento de la musculatura central con la que fomentamos nuestro equilibrio, estabilidad y soporte de la columna vertebral. Además, los ejercicios que se practican durante las sesiones corrigen la postura y el alargamiento de la columna, por lo que aliviaremos las tensiones y evitaremos el desgaste articular.
La práctica regular de pilates mejora la función física y reduce el dolor en personas con dolencias crónicas de espalda baja. Por su parte, especialistas del centro médico Quirón Salud destacan que este método es especialmente útil para quienes sufren hernias discales, escoliosis o tensión muscular, ya que permite trabajar de manera personalizada según las necesidades de cada paciente.
En su portal aseguran que "es fundamental contar un buen diagnóstico del problema para obtener un resultado exitoso. También se debe indicar un tratamiento completo adecuado, y la toma de fármacos si es necesario, y diseñar correctamente los ejercicios de pilates".
Flexibilidad y movilidad articular
Uno de los grandes beneficios del pilates es su capacidad para mejorar la flexibilidad y la movilidad articular. Muchos dolores de espalda están relacionados con la rigidez muscular y la falta de movimiento en ciertas partes del cuerpo. De este modo, los ejercicios de pilates, que combinan estiramientos suaves con movimientos controlados, ayudan a liberar la tensión acumulada y a recuperar nuestro movimiento de manera natural. Además, estos ejercicios promueven una mayor conciencia corporal, lo que permite a las personas identificar y corregir patrones de movimiento perjudiciales en su vida diaria.
Otro aspecto destacable del pilates es su enfoque en la respiración. Durante las sesiones, se enseña a sincronizar la respiración con los movimientos, lo que no solo mejora la oxigenación muscular, sino que también nos ayuda a reducir el estrés. Este beneficio es crucial, ya que el estrés es un factor desencadenante común del dolor de espalda, por lo que si aprendemos a respirar de manera adecuada y consciente, vamos a conseguir reducir la tensión en los músculos del cuello y los hombros.
Ayuda a la prevención de otras patologías
El pilates también se distingue por su bajo impacto, lo que lo hace adecuado para personas de todas las edades y niveles de condición física. A diferencia de otras actividades físicas que pueden generar estrés en las articulaciones, el pilates se realiza en un entorno controlado y con movimientos suaves, minimizando el riesgo de lesiones, por lo que es un buen complemento en el proceso de recuperación de quienes padecen dolor crónico, ya que pueden realizar los ejercicios sin temor a agravar su condición y bajo la supervisión de una persona instructora.
En este sentido, la entrenadora personal y conocida Youtuber, Patri Jordán, nos hace una demostración en el siguiente vídeo de algunos ejercicios de estiramiento para aliviar la zona de la espalda, cervicales y ciática.
En el contexto de la prevención, el pilates también juega un papel fundamental ya que cuando fortalecemos los músculos estabilizadores de la columna y mejoramos la alineación postural, vamos a reducir también significativamente el riesgo de sufrir lesiones o episodios de dolor en el futuro. Además, muchos instructores de pilates trabajan en colaboración con fisioterapeutas y otros profesionales de la salud para diseñar programas adaptados a las necesidades específicas de cada persona.
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