Ramipril, usos y efectos secundarios de este medicamento para la hipertensión arterial
Tener una vida activa y llevar una alimentación saludable y baja en sal también pueden ayudar a reducir la tensión arterial alta.
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Existen múltiples medicamentos que se usan para reducir la tensión arterial en personas cuyos niveles están demasiado altos, con el objetivo de reducir también los riesgos asociados, como sufrir accidentes cardiovasculares.
Uno de esos medicamentos que pueden ser recetados para estos pacientes es ramipril, que pertenece a un grupo de medicamentos conocidos como inhibidores de la ECA (enzima conversora de angiotensina). Ramipril funciona disminuyendo la producción del organismo de sustancias que aumentan la presión sanguínea. De esta forma se busca relajar y ensanchar los vasos sanguíneos, facilitando que el bombeo de la sangre por el cuerpo.
Ramipril se puede recetar para los siguientes casos:
- Tratar la hipertensión.
- Reducir el riesgo de infarto o derrame cerebral.
- Reducir el riesgo o retrasar el empeoramiento de problemas en los riñones en pacientes que tengan o no diabetes.
- Para tratar su corazón cuando hay una insuficiencia cardiaca, es decir, cuando el corazón no puede bombear suficiente sangre al resto del cuerpo.
- Como tratamiento después de un ataque al corazón con insuficiencia cardiaca.
¿Qué se debe saber antes de tomar ramipril?
El uso de ramipril está contraindicado para algunos pacientes, entre ellos los siguientes:
- Si se es alérgico al principio activo, a otro medicamento inhibidor de la ECA o a cualquiera de los componentes de ramipril.
- Si se ha sufrido alguna vez una reacción alérgica grave conocida con angioedema. Los síntomas de esta reacción incluyen picor; urticaria; manchas rojas en mano, pies y garganta; hinchazón de la garganta y la lengua; hinchazón alrededor de ojos y labios; dificultades para respirar y tragar.
- Si está sometido a diálisis o a cualquier tipo de filtración de la sangre.
- Si padece problemas renales y la sangre que llega a los riñones está reducida (se sufre estenosis de la arteria renal).
- Si se está embarazada de más de 3 meses.
- Si su presión sanguínea es anormalmente baja o inestable.
- Si tiene diabetes o insuficiencia renal y se está tratando con medicamentos.
Antes de recetarle este medicamento deberá tratar con su médico otras características de su caso (como problemas de salud) y los medicamentos de uso habitual (con o sin receta). Su médico le indicará la dosis y otros detalles a tener en cuenta durante el tratamiento.
Posibles reacciones adversas
El tratamiento con ramipril puede hacer que algunos pacientes sufran efectos secundarios. Algunos de estos pueden ser graves, por lo que si se dan los siguientes será necesario recibir atención médica de inmediato:
- Palpitaciones, ritmo cardiaco rápido o irregular. Dolor en el pecho, opresión en el pecho. Pueden darse problemas más graves, como el ataque al corazón o un derrame cerebral.
- Dificultad para respirar o tos.
- Aparición de hematomas con facilidad, sangrado durante más tiempo del normal, síntomas de sangrado, manchas púrpuras en la piel o sufrir de infecciones con mayor facilidad de lo normal. También garganta irritada, fiebre, sensación de cansancio, mareos o palidez en la piel.
- Dolor grave de estómago que puede llegar a la espalda.
- Fiebre, escalofríos, cansancio, pérdida del apetito, dolor de estómago, náuseas, piel u ojos amarillos.
Por otra parte, los efectos adversos frecuentes son los siguientes:
- Dolor de cabeza o sensación de cansancio.
- Sensación de mareo, especialmente en el inicio del tratamiento.
- Desvanecimientos, hipotensión.
- Tos irritativa seca, inflamación de los senos nasales, bronquitis, acortamiento de la respiración.
- Dolor de estómago o de tripa, diarrea, indigestión, sensación de malestar.
- Sarpullido en la piel.
- Dolor en el pecho.
- Calambres o dolor en los músculos.
- Análisis de sangre que muestran niveles de potasio elevados.
El resto de efectos adversos pueden encontrarse en el prospecto. En caso de sufrir alguno se debe poner en conocimiento de un médico o farmacéutico.
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