La IA para detectar cáncer de mama y recuperar la movilidad: los últimos descubrimientos de la ciencia

En la encrucijada entre la ciencia y la tecnología, se están gestando innovaciones que no solo marcan hitos, sino que también transforman las vidas de las personas de maneras extraordinarias. En este contexto, la convergencia de la inteligencia artificial y la medicina ha desencadenado avances notables en dos áreas cruciales: la detección temprana del cáncer de mama y la rehabilitación para restaurar la movilidad. Estos últimos descubrimientos científicos no solo ofrecen una visión inspiradora del potencial humano para la innovación, sino que también brindan esperanza a millones de personas alrededor del mundo. Estos avances son aún prototipos, aunque sus funciones ya han sido probadas con resultados prometedores.

Movilidad después de un accidente cerebrovascular

En el Reino Unido, más precisamente en la Morrello Clinic, un establecimiento de fisioterapia ubicado en Newport, Gales, se ha dado inicio a la fase de prueba de una prenda innovadora: unos pantalones impulsados por inteligencia artificial. Este dispositivo ha sido diseñado con el propósito de asistir a las personas en su proceso de recuperación de fuerza y funcionalidad motora, agilizando de este modo su rehabilitación después de haber sufrido un accidente cerebrovascular.

De acuerdo a los especialistas de la Clínica Mayo, un accidente cerebrovascular implica la interrupción o reducción del flujo sanguíneo hacia una región del cerebro, lo que conlleva a la privación de oxígeno y nutrientes en los tejidos cerebrales afectados. En consecuencia, los pacientes pueden experimentar parálisis en una parte de su cuerpo o la pérdida del control sobre ciertos grupos musculares. En este contexto, se está llevando a cabo una exploración de la aplicación de unos pantalones con inteligencia artificial, desarrollados por la compañía Kurage y bautizados como "Neuroskin".

La operación de este dispositivo, que adopta la forma de pantalones y se extiende hacia la parte superior del torso, es viable gracias a una computadora equipada con inteligencia artificial, la cual está incorporada en la prenda y emite impulsos eléctricos de baja intensidad hacia las piernas. Estos impulsos tienen como finalidad estimular los músculos que han perdido su tono. Esta estimulación tiene como objetivo incrementar la actividad muscular, la fuerza y la coordinación.

Rudi Gombauld, director ejecutivo de la empresa Kurage, describió NeuroSkin como una suerte de "piel adicional" que incorpora sensores capaces de detectar el funcionamiento cerebral. Estos sensores transmiten datos a un sistema de inteligencia artificial que, a su vez, se enlaza con un conjunto de electrodos. En cada paso, este sistema reúne información acerca de las señales cerebrales dirigidas a los músculos que están en buen estado, y posteriormente emite una señal similar a la pierna afectada del paciente, recreando así su patrón de marcha natural.

CÁNCER DE MAMA

Efectivamente, la Inteligencia Artificial está desempeñando una función fundamental en el ámbito médico al complementar la labor humana. En el año 2023, otra de las innovaciones impulsadas por esta tecnología se manifestó en el campo del diagnóstico del cáncer.

Así, este avance tecnológico y la aplicación de la Inteligencia Artificial han permitido a los investigadores del MIT y el Hospital General de Massachusetts desarrollar un modelo capaz de anticipar el desarrollo y la aparición del cáncer de mama hasta cinco años antes.

Este logro ha sido posible gracias a un dispositivo de impresión 3D flexible que tiene el potencial de generar una revolución en el tratamiento de pacientes con alto riesgo de padecer cáncer de mama. El sistema compara datos de análisis para estudiar con precisión las modificaciones en el tejido mamario que podrían dar lugar a la formación de un tumor o el desarrollo de cáncer de mama.

Al someterlo a alrededor de 7.000 casos de enfermedades cancerosas cuyo origen ya había sido identificado, el modelo exhibió una tasa de precisión del 80% en sus pronósticos. Es particularmente destacable que, al enfocarse en tumores que tenían predicciones de alta confiabilidad, constituyendo aproximadamente el 65% del total, la exactitud del modelo se elevó hasta alcanzar el 95%.

Los resultados son prometedores, ya que la inteligencia artificial logra prever el 31% de los casos en pacientes de alto riesgo, lo cual representa un avance notable en la prevención de esta enfermedad. Esto contrasta con las técnicas tradicionales que solo podían anticipar el 18% de estos casos.