'Firedooring': en qué consiste este comportamiento tóxico en las relaciones de pareja
Investigación y Tecnología
El firedooring se basa en que uno de los miembros lo da todo por la otra persona y la otra parte no le responde de la misma manera
La desigualdad en la inversión emocional puede llevar a una acumulación de frustración y desgaste emocional en la persona 'firedoor'
Señales de que tu pareja te está haciendo 'pocketing'
'Haunting', una nueva modalidad tóxica del 'ghosting' dentro de las redes
Las relaciones de pareja suelen ser bonitas al principio y en el caso en las que se producen abusos, son hasta idílicas. Pero una vez que pasa el enamoramiento, los pies se van poniendo en la tierra y vamos teniendo conciencia de lo que va sucediendo se van viendo diferencias. Una de ellas, es en la que toca poner cada uno de su parte.
Hay muchos tipos de abusos como el gaslighting, el ghosting, el curving o el pocketing en los que las parejas van y vienen. Desde hace unos meses, se ha unido el 'firedooring' al diccionario de los comportamientos abusivos en las relaciones tóxicas. Al contrario de los que aparecen y desaparecen, este siempre está pero no cumple su función, es decir, uno de los dos está para todo, invierte tiempo y esfuerzo en tirar de la relación y el otro está como si no fuera con él porque no responde de la misma manera.
De ahí, que a este tipo de comportamiento tóxico se le llame 'firedooring' que significa "puerta de incendio" y se llama así porque este tipo de puertas tienen la particularidad de que son de salida, no de entrada que es precisamente lo que ocurre dentro de estas relaciones que la persona "apagafuego" da y saca todo de sí, pero no entra nada.
Es un comportamiento que afecta negativamente a las relaciones interpersonales, por lo que es importante que estés atento a las señales si no quieres perder tiempo y salud. El 'firedooring' se manifiesta de diversas maneras en las relaciones.
Señales del 'firedooring'
- Desigualdad en el esfuerzo: Una persona tiende a poner mucho más esfuerzo en la relación que la otra. Esto puede manifestarse en términos de tiempo dedicado, planificación de actividades o incluso demostraciones de afecto.
- Falta de compromiso recíproco: Cuando ambas partes no reciben lo mismo, la convivencia, aun cuando no se comparte techo, puede ser una lucha constante por conseguir la misma atención, afecto o consideración que se está brindando. Esto crea mucho malestar porque hay un desequilibrio ya no solo en la relación, sino en el modo de vida.
- Disponibilidad constante: La persona "apagafuegos" o 'firedoor' está siempre disponible. Eso quiere decir que sacrifica su propio tiempo y energía para mantener la relación. La otra parte puede tomar esto como algo garantizado, sin reconocer ni valorar adecuadamente esos esfuerzos.
- Frustración y desgaste emocional: Con el tiempo, la desigualdad en la inversión emocional puede llevar a una acumulación de frustración y desgaste emocional en la persona 'firedoor'. Este desequilibrio puede afectar negativamente la autoestima y la satisfacción general en la relación.
Cómo afrontar el 'firedooring'
Si eres capaz de identificar que en tu relación no hay equilibrio, entonces tienes ya mucho ganado. Pero si además, crees que no mereces ese tipo de relación, entonces es el momento de tomar acción. Estar sumergido en este tipo de relaciones deja mucho daño en la mente y puede que no sea tan fácil para ti empezar a remediarlo y necesites ayuda profesional para repararte. En cualquier caso, si quieres intentarlo y no sabes por dónde empezar, toma nota de algunas maneras de afrontar el primer paso.
- Establecer límites. Es el primer paso para "protegerte". Empieza a no estar siempre disponible y por comunicar sus propias necesidades y deseos.
- Autoevaluación. Ambas partes deben reflexionar sobre sus propias contribuciones a la relación. ¿Existe un equilibrio en los esfuerzos y el compromiso? Esta autoevaluación puede llevar a un mayor entendimiento y ajuste de comportamientos.
- Reevaluación de la relación. Si no sirve de nada porque la otra parte sigue sin esforzarse en aportar, puede que sea hora de plantearte la continuidad de la relación. A veces, la mejor decisión es alejarse de una persona que no te brinda equilibrio y reciprocidad.
No hay comentarios