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Estornudos frecuentes, picazón en nariz, garganta y ojos, congestión y goteo nasal, tos y ojos llorosos son los principales síntomas que presenta una persona con alergia primaveral debido a la inhalación del polen que se desprende en el aire en la primavera. Para el cuerpo son agentes extraños y cuando lo percibe, se desencadenan estos síntomas como una forma de responder de manera inmediata a los agentes nocivos.
Las personas que tienen alergia, durante la primavera, experimentan una disminución en la calidad de vida ya que pasan por situaciones de malestar generalizado ante la aparición de esta sintomatología para la que, muchas veces, se necesita tratamiento específico.
Factores como la alergia propia de cada persona, la concentración de polen en el aire, las condiciones climáticas o la ubicación geográfica influyen en la gravedad de los síntomas alérgicos que son, entre otros, un picor intenso en la nariz, la garganta y los ojos, de los que nadie te va a librar ya que la inflamación e irritación de las mucosas nasales es uno de los síntomas más frecuentes en esta época del año.
Muchas veces, cuando los síntomas son muy severos, la persona necesita tratamiento personalizado para calmar los efectos producidos por el polen en el aire en esta época del año. Sin embargo, hay otras medidas que tienen que ver con los hábitos diarios que te pueden ayudar. ¿Sabías que puedes aliviar estos síntomas a través de la alimentación?
Algunos alimentos y complementos alimenticios ayudan a reducir los síntomas de la alergia primaveral y modular el sistema inmunológico, proporcionando un alivio a las personas alérgicas. Sonia Clavería, médica de familia del departamento técnico de NoVadiet recomienda algunos alimentos que contienen ciertos nutrientes que te ayudarán a combatir la alergia primaveral:
La quercetina es un flavonoide con propiedades antioxidantes y antiinflamatorias que ayuda a reducir los síntomas de la alergia primaveral. Algunos alimentos que contienen quercetina son las manzanas, las cebollas, el brócoli o el té verde, pero también se puede tomar en forma de complemento alimenticio.
El extracto de grosellero negro reduce la inflamación y mejora los síntomas de la rinitis alérgica estacional. Se puede consumir solo, en forma de infusión o complemento alimenticio.
La vitamina D desempeña un papel importante en la regulación del sistema inmunológico y ayuda a reducir la incidencia y gravedad de las alergias. Se puede obtener de la exposición al sol y de alimentos como determinados pescados grasos (trucha, salmón, atún, caballa...) o la yema de huevo. Sin embargo, en algunos casos, puede ser necesario, además, tomar complementos de vitamina D, especialmente si existe una deficiencia.
El manganeso es un mineral esencial que desempeña un papel fundamental en la función inmunológica, además de mejorar las mucosas. Algunas fuentes de manganeso son las nueces, las semillas, los vegetales de hoja verde y el té. Se puede obtener suficiente manganeso a través de la dieta, pero tomar complementos de manganeso asegura el mantenimiento de niveles óptimos.
Los ácidos grasos Omega-3, presentes en pescados como el salmón, la caballa y el atún, como así en las nueces y en las semillas de lino y chía presentan propiedades antiinflamatorias, que pueden ayudar a combatir los molestos síntomas de las alergias primaverales.
El jengibre es conocido por sus propiedades antiinflamatorias y antioxidantes. Se puede consumir fresco, en forma de infusión o como complemento alimenticio.
Esta especia presenta propiedades antiinflamatorias debido a su componente activo, los curcuminoides. Se puede agregar a curries, sopas, arroces, pastas, salsas, legumbres, ensaladas, pescados o verduras, o bien tomar en forma de complemento.
El ajo contiene compuestos sulfurados que tienen propiedades antiinflamatorias y ayudan a mejorar la respuesta inmunológica del cuerpo. Agregar ajo fresco a las comidas o tomar complementos alimenticios de ajo negro fermentado en la época de alergias primaverales resulta beneficioso para la salud.
Los cítricos como naranjas, limones, mandarinas, limas y pomelos son ricos en vitamina C, que tiene propiedades antioxidantes y contribuye a reducir la inflamación, además de fortalecer el sistema inmunológico.
En el mercado existen complementos alimenticios, especialmente diseñados para ayudar con los síntomas de la alergia primaveral, y que se pueden combinar con los nutrientes de los alimentos recomendados por la médica Sonia Clavería.
Sonia Clavería, Médica de Familia del Departamento Técnico de NoVadiet, añade a la alimentación otras maneras que ayudan a combatir la alergia primaveral:
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