Adenovirus 41, las hipotesis sobre la afección detrás de la nueva hepatitis aguda en niños
Investigación
La pandemia y sus mecanismos de protección podrían haber evitado el contagio por otros adenovirus más leves necesarios para el sistem inmune natural
Se confirma la primera muerte por una nueva hepatitis infantil: estas son las causas y síntomas
Alerta por la hepatitis infantil: Cuatro sociedades científicas piden a pediatras extremar la vigilancia
Recientemente la institución sanitaria de las Naciones Unidas ha emitido un informe sobre la "hepatitis aguda y grave" de origen desconocido en niños. Los casos ya se acercan a 200, con una muerte confirmada, mientras las instituciones y expertos continúan investigando el origen de este nuevo brote. Lo curioso de esta nueva hepatitis es que en la mayoría de los casos no presentan fiebre, y en ninguno de ellos se han detectado los virus normales asociados a estas dolencias (hepatitis A, B, C, D y E), detalló la OMS. La hipótesis más plausible hasta la fecha es que un adenovirus esté detrás de estas infecciones que están afectando a menores, cuya edad oscila entre los 1-16 años.
De 48 niños analizados, había 37 (el 77%) que dieron positivo por adenovirus, un tipo de virus especialmente frecuente, que causa por lo general síntomas gastrointestinales y respiratorios. Concretamente, en 18 casos ha sido identificado el adenovirus F 41. En 20 casos ha sido detectado el SARS-CoV-2. Y en 19 casos ha sido detectada coinfección por SARS-CoV-2 y adenovirus. Lo que desconcierta a los experos e investigadores es que los adenovirus no suelen causar enfermedad grave como es la inflamación del hígado. Entonces, ¿cómo se manifiesta esta común patología?, y ¿por qué está afectando de esta manera?
HIPÓTESIS
La principal hipótesis es que un "cofactor" está provocando en los niños pequeños que'' infecciones normales por adenovirus sean más graves o que desencadenen una inmunopatología". También se baraja la idea de que los mecanismos y normativa de prevención durante la pandemia han protegido no solo del coronavirus sino de otros virus respiratorios; bien contar con antecedente de infección por SARS-CoV-2 u otra infección (no se descarta ómicron leve); bien una coinfección con coronavirus u otro virus; bien una intoxicación ambiental o con algún fármaco o sustancia tóxica.
Sin embargo, podrían haber incrementado las posibilidades de sufrir hepatitis. Esto se debe a que en este periodo de cuarentena y aislamiento social muchos niños no se han contagiado con otros adenovirus más leves que son necesarios para el sistema inmunológico natural, por lo que ahora se enfrentan a un virus de mayor gravedad.
Asimismo, debido a que varios casos han presentado coinfección por Adenovirus y SARS-COV 2, pueden indicar cierta sinergia entre ambas infecciones que dañan al organismo, debilitan el sistema inmune y favorecen la entrada de otros agentes ifecciosos.
Otra hipótesis que se estudia apunta a que se trate de una nueva variante de adenovirus (con o sin los cofactores mencionados). Los investigadores no descartan tampoco que pueda tratarse de una intoxicación ambiental, o que estén ante un nuevo patógeno, o incluso ante una nueva variante de SARS-CoV-2.
Sin embargo, en lo relativo a las vacunas vacunassí descartan su posible intervención ya que que ninguno de los niños afectados estaba vacunado.
Síntomas Adenovirus41
Los adenovirus son uno de los patógenos más comunes en humanos y solemos encontrarlos en enfermedades respiratorias, oculares, gastrointestinales, urinarias y un largo etcétera. De hehco, se han identificado 103 subtipos en la actualidad ligados a diversas enfermedades y patologías.
Los adenovirus son virus que infectan normalmente los revestimientos de las vías respiratorias, ojos, intestinos, vías urinarias, sistema nervioso… provocan infecciones que derivan en fiebre o patologías como resfriado común, conjuntivitis, pulmonía, bronquitis o episodios diarreicos.
El serotipo 41 de la especie F del adenovirus está detrás de entre un 1,2 y un 15% de las gastroenteritis pediátricas. Es decir, crea un cuadro de fiebre, vómitos y diarrea (y no problemas hepáticos). No obstante, sí están documentados algunos casos de hepatitis en niños inmunodeprimidos, pero que no tienen que ver con los cuadros clínicos reportados hasta ahora.
También te puede interesar
Lo último