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Los avances terapéuticos requieren también de otros logros sociales

Día Mundial de la Lucha contra el Cáncer

La innovación clínica ha virado el pronóstico, pero quedan brechas sociales por cubrir

Los pacientes aluden a los estigmas que les acompañan en el ámbito laboral

El 28,4% afirman haber perdido o dejado el trabajo tras su diagnóstico

Las mejoras en el cribado y en las técnicas de radiodiagnóstico han contribuido también a la detección precoz y el aumento de la supervivencia. / Europa Press

Los tratamientos contra el cáncer han avanzado enormemente, pero para los pacientes no todo es la medicina clínica. Quedan muchos huecos por cubrir en lo social y lo sanitario. En España se estima que en 2040 la incidencia alcance los 341.000 casos. Los más prevalentes son colon y recto, mama, pulmón, próstata y vejiga. Según las estimaciones de la Sociedad Española de Oncología Médica, el número de cánceres diagnosticados durante 2024 alcanzará los 286.664 casos, lo que supone un incremento del 2,6% respecto a 2023. Desde el punto de vista de la innovación terapéutica, de las 39 últimas aprobaciones de la Agencia Europea de Medicamentos, 13 son oncológicos. Los avances en muchos tipos de cáncer en las últimas décadas han sido en algunos casos, revolucionarios.

Con motivo del Día Mundial Contra el Cáncer, que se celebró ayer 4 de febrero, la Sociedad Andaluza de Oncología Médica y la Sociedad Andaluza de Cancerología el gran avance que se ha logrado en el abordaje, diagnóstico y tratamiento del cáncer en la comunidad en los últimos años, y que está suponiendo un aumento de la supervivencia y mejora de la calidad de los pacientes. “Un avance que es debido gracias a los progresos más recientes en las terapias oncológicas, la investigación en los diferentes tipos de tumores y la mejora de la calidad asistencial de los pacientes, además de en los programas de detección precoz y prevención”, señalan.

De hecho, la supervivencia de los pacientes con cáncer de Andalucía y España también ha crecido, y de hecho se ha duplicado en los últimos 40 años, con una previsión de que continúe igualmente creciendo de manera progresiva en el futuro. Un 55% de los hombres y casi un 62% de las mujeres con cáncer en Andalucía logrará superarlos gracias a las técnicas de diagnóstico precoz, los programas de cribado y los últimos tratamientos oncológicos, como la inmunoterapia o las terapias personalizadas dirigidas.

La disponibilidad de nuevas opciones farmacológicas no siempre está vinculada a la equidad en su acceso. Esta es una reivindicación clásica de los colectivos de pacientes. A nivel europeo un estudio recién publicado sobre las desigualdades en el abordaje del cáncer en la UE, promovido por la a Federación Europea de la Industria Farmacéutica (Efpia), a la que pertenece Farmaindustria, encuentra inequidades en el acceso a la prevención y detección, biomarcadores y tratamientos innovadores, y en la calidad de vida de los supervivientes de cáncer.

Los clínicos defienden la nueva legislación que ampara el ‘derecho al olvido oncológico‘

Pese a todo, los colectivos de pacientes, y muchas asociaciones profesionales también, reivindican mejoras más allá de los logros de la biomedicina. Las dos sociedades científicas citadas han recordado la importancia de la legislación recientemente aprobada del derecho al olvido oncológico, que permite que a partir de 5 años sin una recaída, no se pueda discriminar a una persona por haber padecido un cáncer, a la hora de contratar un seguro de vida o una hipoteca. O a nivel laboral y profesional.

Estos días, la Asociación Española Contra el Cáncer ha señalado la importancia de abordar las necesidades, dudas y problemas laborales de los pacientes oncológicos, como, por ejemplo, la reincorporación a la vida laboral o la adaptación de los puestos de trabajo a las secuelas de la enfermedad. Según los estudios del Observatorio del Cáncer, el 37,4% de la población diagnosticada de cáncer en 2023 en España se encuentra en edad laboral, siendo susceptibles de sufrir algún tipo de impacto laboral a causa de la enfermedad. De hecho, el 28,4% de los pacientes de cáncer afirman haber perdido o dejado el trabajo después de la enfermedad y un 3% cambiar de trabajo a consecuencia de esta.

La dificultad para cumplir horarios y mantener el ritmo de trabajo, la estigmatización del cáncer en responsables y compañeros, la toma de decisiones en la comunicación del diagnóstico a la empresa, la falta de información sobre derechos laborales o el impacto emocional son algunas de las dificultades que se pueden presentar durante el diagnóstico de cáncer.

Cuidados, equidad y prevención

La Federación Española de Cáncer de Mama (Fecma) y sus 48 Asociaciones federadas, han trasladado a las autoridades sanitarias su deseo de alcanzar “mejoras en la equidad en salud, faciliten el acceso a servicios de atención al cáncer para que sean accesibles a toda la población y se logre reducir la incidencia y mortalidad por cáncer”, según señalan en un comunicado lanzado dentro de la campaña Por unos cuidados más justos, impulsada por la Unión Internacional contra el Cáncer. De este modo, apuntan a “la mejora de los servicios de atención al paciente, la actualización en la formación de los profesionales sanitarios, la concienciación social reconociendo al movimiento asociativo de pacientes y la mejora del conocimiento de los riegos del cáncer”. Respecto a la prevención, reivindican que “las autoridades sanitarias deben desarrollar políticas de salud pública inclusivas, crear entornos favorables para que la población adopte comportamientos saludables”.

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