De los churros al café: estos son los alimentos que producen más acidez estomacal

Hay alimentos deliciosos que no siempre nos sientan bien. Es el caso, por ejemplo, de los churros o el café; y su capacidad de producir acidez estomacal. Además, con la bajada de las temperaturas y la Navidad como telón de fondo, es posible que nos excedamos en su consumo.

Sin embargo, más allá de estos dos ejemplos, existe una larga lista de manjares que pueden ocasionar esta misma molestia. Hablamos aquí de esa sensación de ardor en el pecho y la garganta, que se produce por el reflujo gastroesofágico. A continuación, vamos a ver algunos de ellos y cómo podemos reducir la acidez.

Alimentos que producen acidez estomacal

Como explica Rocío Práxides, miembro de la Academia Española de la Nutrición y Dietética, para la revista del mismo centro, “el reflujo gastroesofágico se produce por una relajación del cardias o esfínter esofágico interior (EEI), un anillo muscular que actúa como una válvula, abriendo y cerrando el paso entre esófago y estómago”.

Asimismo, esta revista especializada argumenta que “la sensación de ardor estomacal puede venir sola o acompañada de regurgitación (un reflujo de parte del contenido del estómago que llega a la boca)”.

En palabras de Práxides, “algunos alimentos disminuyen la tonacidad del esfínter esofágico exterior y favorecen la relajación del cardias. Estos son más propensos a producir ardor”. Así, por ejemplo, nos encontramos con los siguientes:

• Alimentos grasos como la mantequilla, la nata, los quesos curados, las salsas comerciales y la “comida rápida”.
• Alcohol
• Chocolate
• Menta
• Hierbabuena
• Teofilina (presente en el té)
• Cafeína (presente en el café, bebidas de cola y otras bebidas estimulantes)
• Bebidas gaseosas. En este caso, añade la experta que “aumentan la distensión del estómago y eso incrementa las relajaciones transitprias del EEI”.

Otras causas de la acidez estomacal

Además, existen otros factores de riesgo que pueden incrementar la aparición de la acidez estomacal. Tal es el caso del sobrepeso y la obesidad, especialmente “cuando la distribución de la grasa predomina en el tronco, ya que aumenta la presión intraabdominal”.

También aspectos psicológicos, como el estrés o la ansiedad pueden favorecer esta molestia; además del tabaco, una actividad física muy intensa e incluso la postura que adoptamos después de comer. “La posición de decúbito (tumbado) aumenta la probabilidad de reflujo”, señala la experta.

Cómo reducir la acidez estomacal

Teniendo en cuenta lo anterior, la revista de la Academia de Nutrición y Dietética ofrece una serie de consejos prácticos para disminuir la acidez, tanto a la hora de cocinar como de ingerir los alimentos:

• Controlar el volumen de las ingestas. En este sentido, es preferible comer varias veces al día y en pequeñas raciones. Además, los nutricionistas suelen aconsejar comer más despacio y masticar bien cada bocado.
• Incluir en todas las comidas algo de proteína.
• Implementar técnicas culinarias con poca grasa, como la cocción al vapor, hervidos, salteados… De esta forma, “se acorta el tiempo del alimento en el estómago”.
• Evitar carnes con mucho colágeno, como las grasas y fibrosas, los embutidos o las carnes picadas comerciales.

Finalmente, es aconsejable elevar la cabecera de la cama entre 15 y 20 cm, utilizar ropa holgada en el área del estómago y mantenerse en un peso saludable, siempre en la medida que sea posible.