Síntomas a tener en cuenta para no llevar a tu bebé a la guardería

Con septiembre llega la vuelta al cole y a las guarderías, con todo lo que eso conlleva. En el caso de los bebés, este primer contacto con otros menores supone un aumento de infecciones y contagios, que deben controlarse y seguir unas pautas para evitar complicaciones. Como señala la enfermera pediátrica de Vithas Sevilla, Delia Maesa “cuando el bebé comienza a ir a la guardería, además de los beneficios que le aportarán, sobre todo a los más mayores (socialización, etc.), desde el punto de vista de la salud hay una consecuencia que es la exposición temprana a agentes infecciosos”.

Frente a estos contagios es común la alarma de los padres, quienes deben tener en cuenta cuándo deben dejar al menor en casa y cuándo es oportuno acudir a los servicios de salud. En concreto, desde el equipo de enfermería pediátrica de Vithas Sevilla, Maesa subraya que “siempre que el niño tenga síntomas tales como fiebre, irritabilidad excesiva, vómitos o dificultad respiratoria, son indicios clave de que no debe acudir a su guardería”.

A pesar de lo llamativo, se trata de sintomatología bastante común, pues “el comienzo de la etapa de guardería siempre lleva consigo que, el bebé, casi inevitablemente, curse con episodios de infecciones sobre todo gastrointestinales y respiratorias, que son las más comunes”. De cara a síntomas más graves, como “fiebre alta que no cede, dificultad respiratoria (se le marcan las costillas o se le mueve mucho el abdomen) y que el bebé no quiera comer”, la recomendación de los especialistas es directa, “se debe acudir al pediatra e incluso ir a urgencias para evitar complicaciones”.

Unas consecuencias que van de la mano de los procesos de inmunización del menor, a lo que Maesa suma que “lamentablemente no siempre dejamos a los bebés en la guardería cuando es el momento ideal, ya que durante los primeros meses de vida su sistema inmunitario es más inmaduro y va evolucionando con el crecimiento. Por otra parte, puede que el bebé se ponga más veces enfermo durante esta etapa, pero, en compensación estará creando defensas para enfrentarse a virus y bacterias en etapas posteriores”.

Cómo evitar los contagios en la vuelta a casa

Tras una jornada en la guardería, la vuelta a casa requiere una nueva rutina para los bebés, teniendo en cuenta que han pasado todo el día en contacto con otros niños, así como jugando en diferentes espacios.

Como principales consejos para un mejor control de las posibles infecciones, la enfermera pediátrica recomienza que “al volver de la calle, debemos realizar un buen lavado de manos y, teniendo en cuenta que los bebés y niños pequeños juegan en el suelo, sería recomendable cambiar indumentaria para entrar en casa”.