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Estas son las principales enfermedades que amenazan tu corazón: aprende a identificarlas

Contenido ofrecido por Quirónsalud

El 29 de septiembre se celebra el Día Mundial del Corazón

Estas son las principales enfermedades que amenazan tu corazón: aprende a identificarlas

29 de septiembre 2021 - 00:00

Las enfermedades cardiovasculares son la primera causa de muerte en España con más de 120.000 muertes y 5 millones de ingresos hospitalarios en nuestro país, por encima de otras patologías igualmente graves como el cáncer o las enfermedades respiratorias. Además, según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), relativos a 2018, Andalucía es la comunidad autónoma con la tasa de mortalidad más elevada, con 300 fallecimientos por cada 100.000 habitantes.

Los expertos llevan tiempo insistiendo en la importancia de mantener una vida saludable para prevenir o, al menos, retrasar su aparición. En ese sentido, la Sociedad Española de Cardiología (SEC) recuerda la importancia de cuidar hábitos como la práctica de ejercicio físico al menos 30 minutos al día, no fumar, no abusar del alcohol, seguir una dieta equilibrada rica en frutas, verduras y pescado azul o reducir el consumo de grasas saturadas y de sal, entre otros aspectos. Pero, cuando hablamos de enfermedades cardiovasculares, ¿a qué nos referimos?

Bajo esta denominación se engloban todas aquellas patologías relacionadas con el corazón y los vasos sanguíneos. Pero junto a enfermedades como la hipertensión o el colesterol elevado, más frecuentes entre la población pero a priori menos graves, conviven otras realmente graves como la insuficiencia cardiaca, el infarto agudo de miocardio o la muerte súbita, en las que cada segundo cuenta a la hora de detectarlas lo antes posible y poder tratarlas. De ahí la importancia también de no descuidar las revisiones periódicas a las que debemos someternos cada cierto tiempo o a partir de una edad. Con motivo del Día Mundial del Corazón que se celebra este miércoles, 29 de septiembre, repasamos de la mano de diferentes especialistas del grupo Quirónsalud las causas, síntomas y tratamientos de las enfermedades cardiacas más graves:

Insuficiencia cardiaca

La insuficiencia cardíaca es la enfermedad cardiovascular más importante y que causa más mortalidad, por encima del infarto de miocardio, según ha alertado el doctor Manuel Anguita, jefe del servicio de Cardiología del Hospital Quirónsalud Córdoba. El doctor Anguita ha explicado que no se debe infravalorar esta enfermedad, que presenta una prevalencia muy alta, en España la padecen entre el 4 y el 6% de la población adulta por encima de los 40 o 45 años. Y la incidencia va aumentando también, registrándose unos 6 casos por cada mil personas al año, es decir, de cada mil cordobeses que no hayan tenido esta enfermedad antes, 5 o 6 la desarrollarán este año, por lo tanto, aumenta la prevalencia porque cada vez hay más casos activos y más nuevos.

Dr. Manuel Anguita, jefe de servicio de Cardiología del Hospital Quirónsalud Córdoba

El especialista ha señalado que la insuficiencia cardíaca se produce cuando hay un fallo en la función de bomba del corazón, lo que hace que no pueda enviar la sangre correctamente al resto del organismo y por tanto aumenta la presión en los pulmones y se puede producir líquido en el hígado y las piernas. Los síntomas típicos de esta patología son disnea (el paciente siente que se ahoga) y edema (se hincha). En este sentido, ha indicado que cualquier problema de cualquier estructura cardíaca que no se cura, puede producir insuficiencia cardiaca, por eso es tan frecuente.

El doctor Anguita insiste en que, al ser tan frecuente, no se le da la importancia que tiene. “Un error, y más si se tiene en cuenta que los pacientes ingresados por insuficiencia cardíaca tienen una mortalidad del 10%, cifra que no ha bajado en los últimos 15 años, mientras que la del infarto es del 7% y ha ido disminuyendo en los últimos años”, según recoge el estudio RECALCAR de la Sociedad Española de Cardiología.

Actualmente hay tratamientos efectivos para esta enfermedad, pero hay que hacerlo a tiempo, por lo que aconseja que cuando un paciente tenga disnea debe ir al cardiólogo para estudiar qué la produce y si es por insuficiencia cardiaca, prescribir tratamiento cuanto antes. El tratamiento se realiza con medicamentos y también con el implante de dispositivos (marcapasos especiales, desfibriladores), “tratamientos complejos que deben estar dirigidos por profesionales expertos en esta patología”, ha recalcado el especialista.

Además apunta que, aunque la insuficiencia cardiaca puede surgir a cualquier edad es más probable a partir de los 65 años, pero se puede prevenir con hábitos como “llevar una vida saludable, realizar ejercicio, evitar la obesidad, y no consumir tabaco y alcohol, que es un veneno para el músculo cardiaco”. De igual modo, tener bien controlada la hipertensión es fundamental, es el factor de riesgo más importante para sufrir la enfermedad.

El especialista de Quirónsalud resalta asimismo que los pacientes de cáncer en tratamiento con quimioterapia deben realizarse revisiones periódicas frecuentes planificadas por los profesionales de Oncología y Cardiología para prevenir daños cardiacos.

Infarto agudo de miocardio

Según los últimos datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), el infarto agudo de miocardio fue responsable en el año 2018 de más de 14.521 fallecimientos en España. El episodio de infarto junto a la angina de pecho son la primera causa de muerte en nuestro país. Se produce cuando el músculo cardíaco se paraliza como consecuencia de la obstrucción de la arteria coronaria. Los avances científicos han protagonizado una notable evolución en el tratamiento de esta patología, explica el doctor Dr. Jose Peña Hernández, cardiólogo del Hospital Quirónsalud Marbella, de modo que “el intervencionismo coronario, los cuidados agudos cardiológicos y la farmacología cardiovascular han permitido la reducción de la morbimortalidad del infarto agudo de miocardio en un 50%”.

Dr. Jose Peña Hernández, cardiólogo del Hospital Quirónsalud Marbella

La actuación inmediata es clave en la supervivencia y recuperación del paciente. “El tiempo es un factor fundamental. Se calcula que al menos un 50% del tiempo total que se pierde en la atención a un infarto es el tiempo que un paciente tarda en reconocer los síntomas”, explica. La angioplastia primaria es el tratamiento de referencia en el infarto agudo de miocardio. Mediante esa técnica, el especialista consigue la recanalización de la arteria coronaria en más del 90% de los casos gracias a la inserción de unos dispositivos en forma de malla denominados "stent". “Estos se insertan través de la arteria radial del brazo o vía arteria femoral (en una minoría de casos) hasta alcanzar el interior de las arterias coronarias. Su función es servir de andamiaje para la pared de la arteria coronaria y, en consecuencia, rehabilitar el flujo coronario de una forma estable y permanente”, según detalla el doctor Peña Hernández.

Además, este especialista recalca que es muy importante que la población en general conozca los síntomas de un evento cardiaco de estas características para reconocerlos lo antes posible y actuar en consecuencia. La alerta debe activarse cuando se sienta dolor opresivo en el pecho (puede irradiarse a hombros, cuello y mandíbula), dificultad respiratoria, vómitos, náuseas, palpitaciones, sudoración y ansiedad. “Si cree estar sufriendo un infarto hay que avisar a los servicios de emergencia sanitaria lo antes posible, y procurar permanecer quieto y sentado no hay que realizar ningún esfuerzo”, apunta el cardiólogo de Quirónsalud.

Según los últimos datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), el infarto agudo de miocardio fue responsable en el año 2018 de más de 14.521 fallecimientos en España. El episodio de infarto junto a la angina de pecho son la primera causa de muerte en nuestro país.

Angina de pecho

Cuando el riego sanguíneo no llega en cantidad suficiente al músculo cardiaco, se produce un

dolor como consecuencia de esa carencia de oxígeno. Esto es lo que se denomina angina de pecho, según apunta el Dr. Ramón Rodriguez Olivares, coordinador del Servicio de Cardiología del Hospital Quirónsalud Campo de Gibraltar, y es un síntoma que refleja una enfermedad subyacente de la arteria coronaria. “Las personas que sufren una angina de pecho describen sensación de presión en el pecho, como si un objeto estuviera oprimiendo la zona. El dolor puede reflejarse en otras partes del cuerpo (brazos, cuello, mandíbula, espalda) y puede brotar acompañado de otros síntomas, como mareos, fatiga, náuseas, falta de aire, sudoración, etcétera”.

Dr. Ramón Rodriguez Olivares, coordinador del Servicio de Cardiología del Hospital Quirónsalud Campo de Gibraltar

La reacción ante el dolor es crucial porque una angina de pecho puede desencadenar en un ataque cardiaco, aunque no siempre. De ello depende el tipo de angina de pecho, y en ese sentido existen tres categorías: la angina de pecho estable hace referencia a aquella cuyo dolor aflora cuando se hace ejercicio, es decir cuando el corazón debe trabajar más. “Su duración es corta, unos cinco minutos, y desaparece al tomar medicamento o descansar”, asegura el doctor.

Por su parte, la angina de pecho inestable puede brotar en estado de reposo. “Es inesperada y de diagnóstico más grave. El tiempo de duración puede alargarse a los 30 minutos o más”, según el doctor Rodríguez Olivares. Y el último tipo, llamada angina variante o angina de Prinzmetal suele tener una prevalencia muy baja. Se origina a raíz de un espasmo en las arterias del corazón que reduce por unos instantes el flujo de sangre. Normalmente se produce en momento de descanso (por la noche) y suele ser grave y es un riesgo para la vida del paciente que debe recibir atención médica de inmediato.

Existen factores de riesgo que favorecen la aparición de la angina de pecho, como el consumo de tabaco, diabetes, hipertensión, niveles elevados de colesterol, antecedentes familiares de enfermedades cardíacas, la edad, estilo de vida sedentario, obesidad o el estrés. Y ante la presencia de síntomas compatibles con angina de pecho debemos realizar pruebas que nos confirmen la existencia de un déficit de riego coronario.

“En el caso de la angina estable, las pruebas “no invasivas” son el primer escalón, como la prueba de esfuerzo, la gammagrafía miocárdica y el TAC coronario. En el caso de que se obtenga un resultado alterado en alguna de ellas, el siguiente paso es la realización de una coronariografía diagnóstica la cual nos permite observar las arterias coronarias con contraste a través de un catéter insertado a través de la arteria de la muñeca. En casos con síntomas muy claros y presencia de varios de los factores de riesgo arriba mencionados, se puede optar por la realización de una coronariografía diagnóstica directamente”, asegura.

En la angina inestable, la coronariografía debe realizarse directamente en un período corto de tiempo, ya que suele requerir la realización de una angioplastia coronaria o incluso de un by-pass coronario en casos complejos. Y en el caso de la angina variante o de Prinzmetal, el diagnóstico suele ser más complicado si el espasmo coronario no se reproduce durante la realización de las pruebas anteriores.

Una vez confirmado el diagnostico de angina y sopesado la magnitud del problema coronario, existen diferentes tratamientos para la misma. Según el especialista de Quirónsalud, en una buena proporción de los pacientes, el problema puede ser resuelto con la realización de una angioplastia coronaria la cual se puede realizar en el mismo procedimiento diagnóstico, pero pasaría a denominarse coronariografía diagnóstico-terapéutica. “En los casos en los que la coronariografía diagnóstica demuestre la existencia de varios vasos afectados de forma importante, debe considerarse la posibilidad de realizar un by-pass coronario. Y en una menor proporción pacientes, el riesgo de estas intervenciones puede ser elevado y se puede optar por manejar los síntomas exclusivamente con fármacos”, advierte.

Muerte súbita

Se denomina muerte súbita al fallecimiento repentino e inesperado de una persona aparentemente sana sin que concurra una causa obvia como un accidente, violencia, etc. “La muerte súbita sobreviene a menudo sin síntomas concretos específicos que la adviertan a priori”, explica el doctor José Antonio de la Chica, cardiólogo del Hospital Quirónsalud Málaga, por lo que es trascendental que la población general comprenda que "muerte súbita" e "infarto de miocardio" no son sinónimos.

Dr. José Antonio de la Chica, cardiólogo del Hospital Quirónsalud Málaga

“Muchos familiares de pacientes con antecedentes de muerte súbita afirman que su padre, hermano, etc. fallecieron de infarto "fulminante" pero en la mayoría de las ocasiones no hay autopsia que justifique esta afirmación. Podría haber sido la rotura de una gran arteria o un tromboembolismo pulmonar masivo, etc. Por ello es crucial conocer la causa exacta de la muerte súbita de un familiar de primer grado, precisamente para evitar la de otro miembro de la familia”, añade.

La causa más frecuente es una arritmia ventricular que a su vez puede ser la consecuencia de diversas enfermedades cardíacas, algunas de ellas de origen genético y otras, por el contrario, adquiridas.

“Cuando ocurre un infarto de miocardio, una miocarditis o una toxicidad cardiaca entre otras muchas enfermedades, suele aparecer una cicatriz en el músculo cardiaco. Estas cicatrices también se han descrito en atletas con sobreesfuerzos físicos abusivos. La actividad del músculo cardiaco depende de un complejo sistema eléctrico que puede verse alterado por la presencia de estas cicatrices en los ventrículos, como si de un cortocircuito se tratara. Esto puede provocar taquicardias de más de 200 latidos por minuto que si no se revierten precozmente resultan incompatibles con la vida”, explica el doctor De la Chica.

En las enfermedades de origen genético, no existen factores de riegos específicos como tales, por el contrario, en las cicatrices derivadas de un infarto, los factores de riesgo serían los propios de la cardiopatía isquémica: tabaquismo, diabetes, hipertensión, dislipemia, obesidad y sedentarismo.

Además, cuando se producen en deportistas muy jóvenes, lo más frecuente es porque sea debido una enfermedad genética de músculo cardiaco como la miocardiopatía hipertrofia o la arritmigénica que haya pasado desapercibida. Según explica el especialista de Quirónsalud, “hay que saber que el corazón tiene un sistema eléctrico con un funcionamiento molecular muy complejo que puede estar alterado también genéticamente y que puede fallar de forma repentina como ocurre en las canalopatías. Además, las enfermedades de la arteria aorta pueden ser fatales en deportistas muy jóvenes”, explica.

En deportistas aficionados de más de 40 años, es el infarto la causa más frecuente pero no es la única, según avisa este cardiólogo, que apunta que muchos de estos casos serían evitables con un reconocimiento cardiológico específico y con técnicas de imagen avanzadas como la resonancia o el TAC cardiaco.

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