Entre los truenos del mercado, el Rayo en el Villamarín

Sevilla/Está todo el personal que siente en verdiblanco distraido, a veces preocupado, otras engolosinado, con el fabuloso ruido mediático que provoca el mercado de fichajes y su ilógica prolongación semanas más allá de que la Liga comience. Pero hoy toca fútbol en el cuidado prado del Benito Villamarín. Balón rodando, once contra once y tres puntos en juego.

A buen seguro que Manuel Pellegrini, ese eficacísimo sostén que hoy disfruta el Real Betis Balompié, habrá puesto mucho énfasis en mentalizar a los jugadores para que esta noche salgan a enfrentarse con el Rayo Vallecano con los cinco sentidos y más. Algunas de las piezas básicas del mecano que ha montado el chileno han atravesado días de mucha incertidumbre, con la mente y los deseos viajando antes de tiempo.

Y el Rayo Vallecano, por mucho que venga de encajar un ominoso 0-7 el pasado lunes, es un buen equipo que además querrá cicatrizar el costurón cuanto antes.

El equipo de Francisco trata de hacer hecho borrón y cuenta nueva de ese partido calificándolo como un accidente aunque conscientes de que no puede volver a ocurrir.

Pese a esa abultada derrota, el inicio de temporada del Rayo no está siendo malo y como prueba están las dos victorias logradas a domicilio ante Almería y Granada, ambas con idéntico resultado (0-2).

Para este partido, Francisco Rodríguez cuenta con todos sus efectivos disponibles y podría hacer alguna variante en su once con la entrada del senegalés Pathé Ciss en el centro del campo, en lugar de Unai López, o de Sergio Camello en el ataque, que pelea por un puesto con Raúl de Tomás.

El choque ante el competente equipo del sur de Madrid lo afronta el Betis con las bajas ya conocidas del meta chileno Claudio Bravo, el centrocampista portugués William Carvalho, el extremo brasileño Luiz Henrique y el mediapunta francés Nabil Fekir, a los que esta semana se ha sumado el interior Aitor Ruibal, operado de apendicitis.

Es también baja confirmada por el entrenador bético el centrocampista marfileño Paul Akouokou, que ultima su traspaso al Olympique de Lyon francés.

Innegociable para Pellegrini, por lo visto hasta ahora, es la pareja de mediocentros formada por el argentino Guido Rodríguez y el recién llegado Marc Roca, cedido por el Leeds inglés, binomio en el que los verdiblancos sustentan el equilibrio defensivo y la salida del balón hacia la línea de tres por detrás del nueve.

Manuel Pellegrini tiene las opciones en esa línea, ante las ausencias de Aitor Ruibal y Luiz Henrique, de Rodri Sánchez y el hispano-argentino Juan Cruz, además de la del fijo Ayoze Pérez, innegociable para el chileno desde que llegó cedido la pasada temporada procedente del Leicester inglés.

El brasileño William José da Silva se ha reivindicado desde que comenzó el año, aunque las incógnitas sobre su continuidad hacen tener opciones a Borja Iglesias para el ataque.

El delantero gallego ha solido cuajar buenas actuaciones ante el Rayo Vallecano, las más sonadas en los dos partidos de las semifinales de la Copa del Rey de 2022, con un golazo en Madrid y el tanto que evitaba la prórroga en la vuelta y sellaba el pase a la final que luego ganaron los verdiblancos en La Cartuja al Valencia.

Borja es un jugador ciclotímico, que atraviesa fases en las que se le caen los goles con otras en las que no da una a derechas, como ahora le ocurre.

Y sin los lesionados Fekir y Luiz Henrique, más los traspasados Canales y Juanmi y el retirado y añorado Joaquín, este Betis pierde mucho en capacidad intimidatoria.

Pellegrini tiene que dar con la tcla para que el fútbol que brota por las botas de Isco, con Guido y Marc Roca como contrafuertes, sea aprovechado en los últimos metros con más continuidad. Que el Betis de la primera media hora en Bilbao no se caiga y sostenga su rendimiento en los más de cien minutos que en esta Liga suele durar un partido de fútbol.

Se juega el Betis irse al parón de selecciones bien colocado, en la zona que le corresponde, con un buen bagaje de siete puntos de quince posibles.