La polémica del Betis - Getafe: un penalti no pitado y una roja perdonada
Real Betis
En el minuto 2 de partido se pidió una roja para Bertug por agresión sobre Héctor Bellerín
Antes del descanso, Luis Milla pateaba el tobillo de Pablo Fornals dentro del área sin sanción alguna
La crónica del Real Betis - Getafe CF
SEVILLA/Desde las 19:00 horas daba comienzo en el estadio Benito Villamarín el partido correspondiente a la tercera jornada de LaLiga EA Sports entre el Real Betis Balompié y el Getafe CF (ya que en su día se aplazó por la participación del conjunto de las trece barras en la UEFA Conference League. Era un partido trascendental, de vital importancia para ambos clubes ya que eran tres puntos importantes para alejarse de la zona media de la tabla e intentar asentarse en los puestos europeos desde el principio de la competición. Pero, por si alguien lo dudaba estándo el Getafe de José Bordalás de por medio, el juego directo y el cuerpo a cuerpo iban a estar presentes desde el primer minuto del partido. En algún caso, además, con la poca fortuna en su trabajo de Pulido Santana, el árbitro del encuentro.
En el minuto 2 de partido, en una acción en la que tanto Héctor Bellerín como Bertug fueron a una disputa, el dorsal 10 del Getafe dejaba su pierna izquierda en el aire al caer y golpeaba en la rodilla izquierda de Héctor Bellerín, intentando desplazar la pierna del lateral bético efectuando una evidente agresión sin balón, que fue revisada en el VAR por Iglesias Villanueva y este dictaminó que no había absolutamente nada en la jugada (en la que el colegiado no pitó falta ni mostró amarilla al jugador azulón).
La polemica no cesó en el partido
Pocos minutos después, volvió a haber una sucesión de faltas en los primeros minutos del encuentro en las que Álex Sola, Bordalás, Alderete y Aleña recibieron amonestaciones por faltas bastante agresivas en una franja de cuatro minutos. El resumen perfecto del plan de partido que había venido a plantear el Getafe a Sevilla. Aunque esas acciones no iban a ser las últimas en el partido.
Sin duda, tarde para olvidar de Pulido Santana que antes de enfilar el túnel de vestuarios en Heliópolis volvió a cometer un grosero error. En una internada de Pablo Fornals por banda diestra, centraba la pelota ya dentro del área y al segundo, llegaba Luis Milla y le asestaba al de Castellón de la Plana una patada en su tobillo derecho. La jugada volvió a revisarse, sin penalización alguna (ante la incredulidad de los asistentes al estadio que veían en sus teléfonos la repetición de la jugada). Se iba así el equipo de Manuel Pellegrini al descanso con un inmerecido empate a cero y con los mismos jugadores sobre el césped que los de Bordalás.
Estuvo a punto de volver a equivocarse
Al salir de vestuarios, estuvo muy cerca de cometer otro error grosero que hubiese influido de forma notoria en el devenir del encuentro. Vitor Roque, tras una serie de rebotes en el área, remataba con la cabeza un balón a un metro de la línea de meta y Luis Milla interponía su mano evitando el tanto. En primera instancia no lo pitó, pero en este caso Iglesias Villanueva si lo llamó a la pantalla para que revisase en el VAR una potencial pena máxima.
Un penalti con el que el Betis abrió la lata gracias a la buena ejecución de Giovani Lo Celso y encarriló tres puntos que eran importantísimos. El partido finalizó con cinco tarjetas amarillas para el Getafe (que son seis contando la de Bordalás) y tres amonestaciones para los verdiblancos.
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