Así juega Romain Perraud, el primer fichaje del Betis para la temporada 2024/25

Sevilla/Romain Perraud aterrizó este lunes en Sevilla para convertirse en el primer fichaje del mercado veraniego del Betis. El club verdiblanco abonará unos 3 millones de euros por el traspaso al Southampton, que hace cuatro años abonó unos 12 al Stade Brestois. Aquella temporada, en 2020, Perraud se consagró como el mejor lateral izquierdo de la Ligue 1, aunque en los últimos años no ha conseguido tener continuidad a máximo nivel.

Veloz y de carácter ofensivo, el galo es un lateral zurdo cuyas principales cualidades están enfocadas en la parcela atacante. Perraud es un defensor de mucho recorrido, con capacidad para proyectarse con facilidad en el último tercio del terreno de juego, donde saca a relucir su profundidad para alcanzar línea de fondo. Además, el francés posee condiciones muy interesantes a nivel técnico, principalmente por su buen golpeo de balón en el centro lateral y el disparo a portería.

Diez goles producidos en su mejor año

En su mejor campaña, la 2020/21 con el Stade Brestois, Perraud repartió siete asistencias y marcó tres goles, erigiéndose como uno de los mejores laterales en el marco europeo. Fruto de aquel buen nivel con tan solo 23 años, el Southampton apostó firmemente por el carrilero. Sin embargo, el galo no rindió como se esperaba en un escenario tan exigente como la Premier League y acabó marchándose en calidad de cedido al Niza, equipo en el que estuvo el pasado curso.

Perraud, cuyo fichaje ya ha sido oficializado, ha sumado únicamente cuatro asistencias y cinco goles en sus últimas tres temporadas, con lo que se encuentra en un momento donde necesita confianza, protagonismo y muchos minutos para recuperar su mejor nivel. Para el Betis se trata de una buena oportunidad de mercado, pues firma a bajo coste a un futbolista que llegó a costar 12 millones en el punto más álgido de su carrera.

Por otra parte, el equipo de Pellegrini recupera un perfil de lateral del que carecía tras la marcha de Álex Moreno, ya que el francés es de un estilo similar al del catalán. No obstante, evidentemente aún queda por conocer el punto más relevante: si sus rendimientos pueden estar a la misma altura.