Juanmi convierte el enfado en una gran alegría (2-1)
La crónica del Betis-Celje
Un gol del malagueño en el minuto 94, cuando peor lo pasaba el Betis, les da a los verdiblancos un triunfo de valor para encauzar su camino en la Liga Conferencia
Natan adelantó a los suyos en un cabezazo que lo dejó sangrando, empató Nieto y el Celje asustó con una clarísima ocasión de Matko
Así le hemos contado el Betis-Celje
Sevilla/El Betis dio un importante paso para la clasificación en la Liga Conferencia gracias a ese elemento siempre presente en el fútbol que responde por azar. Los verdiblancos resolvieron en la última jugada la cita con el Celje eslovena gracias a una internada por el centro de Juanmi, que acertó con la portería en su lucha con el central Vuklisevic.
El malagueño de Coín fue providencial, una vez más. Con el Celje atacando después de empatar con el tanto del español Nieto, Juanmi demostró, como tantas y tantas veces, que es el más listo de la clase. Aprovechó que estaba solo por el centro, arrancó la moto y tuvo la fuerza suficiente para llegar hasta Stubljar. Ahí buscó la picada y encima se encontró con la ayuda del defensa esloveno, pero qué más da, lo único trascendente es que todos los béticos pudieron despertar de una vez y celebrar con fruición un triunfo que ya parecía imposible a esas alturas.
De la nada al todo
El fútbol es así, por eso es tan maravilloso, se puede pasar de la nada al todo en apenas segundos. La demostración estuvo esta vez en el Benito Villamarín, como un día antes lo fue en el Parque de los Príncipes de París. Sólo valen los goles, no las ocasiones y Matko falló una clarísima para el Celje (84’) cuando se quedó absolutamente solo delante de Adrián. Juanmi hizo justo lo contrario, colarla bola entre los palitos y el Betis tenía todo el derecho a celebrarlo a lo grande.
Fue un final importante con vistas al desarrollo de la competición, pues un segundo tropiezo en el Benito Villamarín hubiera sido demasiado. Tanto que el público bético había silbado en diferentes ocasiones a los suyos, sobre todo después de la ocasión antes reseñada de Matko, donde tuvo lugar la bronca más sonora.
Antes, en el intermedio, también hubo un sonido de reprobación que iba a definir a la perfección la primera parte desarrollada por los hombres de Pellegrini. Como contra el Copenhague, no fueron capaces de meterse nunca en el juego, de imprimirle una marcha más para desnudar a un Celje que estaba a años luz en lo referente a la calidad futbolística. Pero, claro, para marcar esas diferencias es necesario poner muchísimo más ardor.
Primera mitad para olvidar
El técnico chileno había salido otra vez con el nuevo esquema de 1-4-4-2, pero entre el desacierto de Bakambu en los pocos remates que tuvo y esa pelea contra su propia sombra del Chimy Ávila era una evidencia que el Betis sólo podía adelantarse a través de un rebote o de cualquier otra circunstancia del juego azarosa.
Sólo hubo una combinación de cierta calidad, con el balón circulando a la velocidad necesaria para hacer sufrir a los rivales. Hubo que esperar hasta el minuto 44 para ello y todo nació en un robo de Assane Diao por la banda derecha para que la pelota llegara finalmente a Pablo Fornals en el sector izquierdo. El castellonense le pegó con todo al balón, pero se le fue muy arriba.
Lo demás fue pura apariencia, pero sin ningún fondo. Porque el Betis volvía a ser un equipo bastante frío, incapaz de leer el juego con calidad cuando la pelota se movía en las zonas que deben originar más peligro a través del toque o de balones profundos. Sólo Sabaly se empeñaba en meter centros con cierta maldad, capaces de hacerle daño al Celje, pero tampoco fue el camino, pues los remates de Bakambu no eran fáciles y siempre fueron imprecisos, sin generar peligro.
Sí era un elemento alentador la incapacidad de Celje para inquietar siquiera a Adrián. Los eslovenos, a pesar de estar bien puestos sobre el campo bajo la dirección de Albert Riera desde el banquillo, eran un quiero y no puedo. Sus futbolistas estaban muy lejos del nivel de los verdiblancos y en algunos casos, como en el del gigante lituano Kucys, el delantero centro, parecía que se habían confundido de deporte. Al menos, eso transmitía su impericia.
La sangre de Natan
Restaba un tiempo entero y el Betis siguió más o menos de la misma manera. Sí atacó un poco más tras la entrada de Abde y Vitor Roque, pero también se desprotegió más atrás. La más clara correspondió al brasileño, con un disparo a bocajarro que le fue al cuerpo del portero esloveno (64’). Ya se intuía, sin embargo, que el gol podía llegar en cualquier momento y lo hizo con un cabezazo de Natan en un centro de Sabaly que provocó una fuerte brecha al brasileño.
Sin embargo, el Betis no iba a saber defender ese 1-0 y concedió el empate con mucha facilidad. Lo lograría Nieto con una volea y después llegó el gran susto a través de Matko. Pero fútbol es fútbol, que diría el recordado Vujadin Boskov. Quien acertó fue Juanmi en la última jugada del partido y el horizonte se despejó para los béticos de golpe y porrazo. Había razones para celebrar, sin duda, pesar de los enfados anteriores. En el corro estaban hasta Natan, con la sangre, y el lesionado Aitor Ruibal. Así de maravilloso es este deporte y por eso nos vuelve loco a todos.
Ficha técnica
2 Real Betis Balompié: Adrián, Sabaly, Bartra, Natan (Diego Llorente, minuto 75), Ricardo Rodríguez, Cardoso (Altimira, minuto 71), Mateo (Abde, minuto 59), Fornals, Assane, Chimy Ávila (Juanmi, minuto 71) y Bakambu (Vitor Roque, minuto 59).
1 NK Celje: Stubljar, Nieto, Zec, Vuklisevic, Karnicnik (Nemanic, minuto 71), Seslar (Lhernault, minuto 90), Zabukovnik, Svetlin (Dulca, minuto 71), Matko, Kucys (minuto 53) y Brnic (Kvesic, minuto 46).
Goles: 1-0 (75’) Natan cabecea un centro de Sabaly tras un córner rechazado. 1-1 (81’) Nieto remata de volea un centro de Seslar. 2-1 (94’) Juanmi pica con la derecha tras entrar en solitario por el centro y el balón sale hacia la portería tras tocarlo Vuklisevic.
Árbitro: Novak Simovic (serbio). Buena actuación, supo llevar muy bien el partido. Amonestó a Karnicnik (34’), Kucys (49’), Nieto (54’) y Stubljar (91’).
Incidencias: Partido correspondiente a la tercera jornada de la Liga Conferencia disputado en el estadio Benito Villamarín ante 37.618 espectadores.
Temas relacionados
No hay comentarios