La 'broma' de un inerte e invertebrado Betis

La sola agresividad del rival se come a un equipo con un centro del campo sin el mínimo de consistencia

Así jugaron los futbolistas del Betis ante la Real Sociedad: Sólo Jesús Rodríguez...

Vitor Roque cae ante Pacheco. / Juan herrero / efe

El Betis, claramente, ha dejado de ser un equipo de fútbol. Las lesiones han desnudado el proyecto y ahora mismo Manuel Pellegrini parece encontrarse en un callejón sin salida. Recibe las culpas cuando posiblemente no sea el responsable, al menos el primer responsable. Tiene que demostrar mucho más para sacar la imagen que el beticismo tiene de él y, sobre todo, debe cambiar el discurso. Si no lo hace, ese conformismo que denota va a acabar con su brillante carrera en el Betis y va a ser una mancha en su palmarés como entrenador a nivel internacional, donde aún espera un encargo que está en la mente de todos desde hace tiempo.

Sin un centro del campo decente, el Betis estuvo a merced de una Real Sociedad sin la calidad del año pasado, pero hecho bloque. La agresividad, la intensidad, aburrir a los heliopolitanos a base de faltas y de ganar duelos... bastó a los blanquiazules para sumar los puntos sin prácticamente tirar a puerta, aprovechando un error de Rui Silva y un penalti de los que escuecen.

Invertebrado totalmente, el dúo Altimira-Guirao fue un doble pivote de juguete para los txuri urdin, un equipo de verdad ante un simulacro en el que el único que se salvó fue el chaval Jesús Rodríguez.

Defensa

Ya el bloque empieza a morir arriba. El inicio defensivo está mal diseñado. Pellegrini hace correr a Vitor Roque, haciéndole gastar combustible, sin la coordinación necesaria con las otras piezas. La posición de Lo Celso lo convertía en un cero a la izquierda en fase defensiva y eso, con dos extremos como Abde y el chaval, ya es mucho déficit defensivo. El siguiente escalón, encima, es el agujero negro, un doble pivote en el que se echan en falta jugadores de pierna fuerte y personalidad como Guido, Johnny Cardoso, Marc Roca o el propio William Carvalho.

Pero el Betis, al margen de eso, perdió los duelos por mala colocación, por falta de intensidad, por no ir de verdad... situaciones todas ellas fruto de no creer, de saber los propios futbolistas que han entrado en una situación de desconfianza total y de que, hagan lo que hagan, no les va a salir nada bien. Y todo ese déficit, por ejemplo, se reflejaba en las bandas, donde a la Real le bastaba llevar esa superioridad. Ni le hacía falta pisar área. Los dos goles llegaron en situaciones desde los costados...

Ataque

El argumento fue sólo las conducciones y la electricidad de Jesús Rodríguez. Lo Celso no conectó, se enredaba en acciones individuales. La creatividad, la poca que hubiera, moría en el juego duro de la Real, al borde del reglamento, pero que con esa reiteración de faltas tenía al Betis inutilizado.

Con un Abde desconocido, sólo en la segunda parte la proyección de Sabaly intentó cambiar algo.

Virtudes

Las ganas del chaval. Jesús Rodríguez es la única vía de esperanza.

Talón de Aquiles

Un sistema defensivo ya débil se cae por el centro.

Uno por uno

Rui Silva Nervios patentes en salidas del área propias de no estar centrado. Midió mal en el centro lateral del 1-0, en el que se vendió.

Sabaly Se mantuvo en duelos en espacios corto en la primera mitad. En la segunda apareció con más metros. Al menos le puso tensión, pero sin fortuna.

Bartra Oyarzabal lo sacó de quicio. Y a la hora de crear no tuvo su día.

Diego Llorente Da la impresión de que mejora en el perfil derecho. Incómodo, tuvo que acudir a una zona que no era suya en la carambola del primer gol.

Perroud Superado siempre por un Take Kubo muy móvil, fue víctima del fútbol de nuevo cuño en el penalti sobre Oyarzabal. Sin nivel para LaLiga de momento.

Atimira No tiene consistencia futbolística para ser el sostén de este Betis. Por sus terrenos se quebró el Betis y entregó el partido el sistema defensivo de Pellegrini.

Carlos Guirao Una responsabilidad que, ni de lejos, le corresponde. Superado por las circunstancias.

Jesús Rodríguez El único con chispa capaz de inquietar a la Real Sociedad. Protagonizó, como en la República Checa, varias acciones interesantes en las que no encontró con quien asociarse.

Lo Celso Perdido. Aunque lo intentó, estaba lejos de donde se cocía el fútbol. Su problema es de gestión de terrenos. Debe acertar Pellegrini para hacerlo visible.

Abde Desconocido. Apático, cuando es un hombre que debe arriesgar en el uno contra uno. Sustituido cuando empezaba a despertar, aunque ese pisotón lo mermó.

Víctor Roque Una isla. Carreras a menudo sin sentido y poca capacidad para quedarse con balones de espaldas a la portería. No ayuda.

Iker Losada No mejoró nada de lo anterior. Totalmente insustancial.

Chimy Ávila En el Betis no ha aparecido todavía ese jugador agresivo que metía miedo en el Osasuna. En la banda se pierde, lo vemos partido tras partido, pero ahí sigue...

Bakambu El equipo no saca provecho de su físico. Otro caso Chimy Ávila.

Juanmi Sin nada que aportar,

Mateo Flores El chaval lo intentó.