Betis: Un Pellegrini 'camaleónico'

Análisis

El chileno se adapta a las circunstancias: cambia el dibujo y optimiza los recursos elevando los rendimientos individuales · Su mensaje sigue calando en un vestuario muy comprometido

Betis: Johnny, la presión efectiva

Pellegrini, durante un encuentro de la presente temporada en el Benito Villamarín.
Pellegrini, durante un encuentro de la presente temporada en el Benito Villamarín. / E.P.

Sevilla/Manuel Pellegrini ha sabido adaptarse a las circunstancias y el triunfo ante el Atlético de Madrid ha fulminado cualquier atisbo de duda en torno a su figura, la cual se ha revitalizado después de las derrotas en Varsovia y en el derbi.

El chileno, que mantiene siempre una línea de calma y mesura, tanto en los buenos como en los malos momentos, sigue con su media de puntos en el Betis desde que llegara ya hace cinco temporadas, con una regularidad intacta que hace que el cuadro verdiblanco nunca se caiga: 12 puntos en la 2020-21; 21 en la 2021-22; 20 en la 2022-23; 17 en la 2023-24 y 18 en la 2024-25, siempre tras once jornadas de Liga disputadas. Un reflejo de la importancia y la vigencia que tiene la figura del técnico santiaguino en el Betis. Un Pellegrini camaleónico con la ambición intacta.

EL paso del inamovible 4-2-3-1 al 4-4-2

Ante las lesiones de jugadores importantísimos en la plantilla (Isco y después Lo Celso), Pellegrini buscaba soluciones y las ha encontrado, siendo el primer paso adaptarse a los recursos que tiene. Y sin jugadores de tanta técnica ni control de la pelota decidió cambiar de dibujo, pasando de su inamovible 4-2-3-1 al 4-4-2 con dos delanteros. Como resultado, un Betis más vertical, con una coordinada y efectiva presión alta, mucha intensidad, ritmo alto y agresividad en la disputa para intentar robar la pelota –casi siempre en campo contrario–, como se vio ante el Atlético de Madrid.

El cambio de disposición táctica ha dado como resultado un Betis más vertical, con mucha llegada

Además, la solidez defensiva sigue siendo uno de los sellos del Betis de Pellegrini. Sólo el Atlético, con 7, lleva menos goles recibidos que el Betis (9) y el Getafe (también 9), lo que muestra la fiabilidad atrás de los verdiblancos, plasmada en el buen hacer de un formidable Diego Llorente –acierto de la dirección deportiva– y de un Bartra que si le respetan las lesiones y los problemas físicos sigue siendo un baluarte defensivo de altísimo nivel en un conjunto verdiblanco que en 11 jornadas suma 4 porterías a cero (Alavés, Leganés, Espanyol y Atlético).

Exprimir los mimbres 

Hasta el mercado invernal aún queda y Pellegrini está sabiendo optimizar los recursos. "Ahora hay que jugar con el plantel que tenemos, mejorar los resultados y mantenernos en objetivos en diciembre, seguir en la Conference y en la Copa, y en Liga estar en expectativas para luchar por Europa", dijo el chileno en la previa del partido ante Osasuna. Y a los mimbres de la plantilla les está sacando partido elevando los rendimientos individuales, sacando con ese cambio de dibujo más provecho a las características ofensivas de muchos jugadores. Como ejemplo de esa elevación de nivel, Johnny, quien confirmó ante el Atlético que ha recuperado su mejor versión; sin olvidar a otros, como Pablo Fornals, mucho más entonado que en el comienzo liguero; o el Chimy, algo mejor arriba que en la banda.

Cualquier duda en torno al santiaguino ha quedado fulminada tras superar el bache de Varsovia y el derbi

Así, exprimir y potenciar los elementos que tiene es el camino trazado por el Ingeniero y seguido por sus jugadores, en los cuales sigue calando su mensaje. El compromiso de la plantilla verdiblanca es indudable y así se reflejó en el terreno de juego ante el conjunto de Simeone, existiendo una excelente comunión entre el equipo y la afición.

Los jugadores del Betis celebran el triunfo conseguido ante el Atlético de Madrid.
Los jugadores del Betis celebran el triunfo conseguido ante el Atlético de Madrid. / Antonio Pizarro

Mejorar la finalización

El Betis genera ocasiones, llega muchas veces al área rival, pero en la definición no termina de estar acertado. Un caudal ofensivo bastante importante, pero por el momento desaprovechado. Sólo tres remates a portería de 24, ante el Atlético, es un reflejo de esa falta de eficacia que se viene observando desde el principio de temporada, con esa excesiva dependencia de los tantos de Lo Celso. Abde está en un gran momento de forma, pero le falta mejorar un punto a la hora de finiquitar las jugadas, amén de que en ocasiones peca de exceso de individualismo; y Vitor Roque, tal vez aún por su juventud, debe ir adquiriendo en su proceso de aprendizaje ese punto de calma tan necesario a la hora de finalizar las jugadas. Si a su potencia y aceleración le pone cierto control, mejorará en la definición. Pero más allá del buen hacer del marroquí y de las enormes ganas del brasileño, además de la entrega del Chimy y Bakambu, le falta a los verdiblancos un puntito de calidad en la delantera que podría ser corregido en el mercado invernal.

La Conference, la Copa y el mercado

Se preguntaban muchos béticos a la finalización del partido ante los colchoneros, por qué un cambio tan grande del jueves, ante el Copenhague, a esta última cita liguera. Toda la intensidad, el ritmo y la entrega ante los de Simeone faltaron frente a los daneses. Y es que de momento, en la Conference, dos pinchazos que no obstante tienen solución. Quizá, los nombres y el nivel de los rivales en esta competición europea no sean, en esta fase de liguilla, demasiado atractivos, pero con la llegada de las eliminatorias todo cambiaría. El panorama se vería de otra manera y la ilusión crecería. Además, este jueves arranca la Copa, otra vía para llegar a Europa ganando, como en la Conference, un título.

Si el Betis en diciembre vive en los tres torneos y el club acierta en invierno, más Lo Celso e Isco, vía para soñar

El objetivo marcado por Pellegrini es que el Betis llegue vivo a diciembre en las tres competiciones y por ahora el chileno cumple con su trabajo. Luego, llegará el turno del club en el mercado invernal y acertar en las incorporaciones necesarias será fundamental, pues eso, unido a la recuperación de Lo Celso y de Isco – confiando siempre en una buena recuperación del costasoleño– podría convertir la segunda parte de la temporada en un reto importante y bonito a la hora pelear por cosas importantes. Sin euforia, con cautela y humildad, pero siempre con ambición y exigencia. La misma que sigue teniendo un Pellegrini camaleónico.  

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