La doble lectura del plan

Sevilla/Un punto es un punto, y que el Betis lo saque de un campo como Mestalla, compitiendo, es positivo para el cuadro de Quique Setién. Pero la cita ante un Valencia que de momento no ofrece las sensaciones del poderío del comienzo de la pasada temporada, también dejó otras conclusiones en un conjunto heliopolitano que a nivel defensivo cuajó un muy buen partido.

El Betis Mantuvo la posesión, sobre todo en la primera parte, y demostró tener una idea clara de juego, pero no aprovechó todo eso para generar peligro real, que fue muy escaso, y cuando tuvo alguna ocasión clara, no la aprovechó. Así, la falta de pegada fue más que evidente, al igual que el bajón físico de algunos futbolistas cuando llegó la hora de partido (Canales, Boudebouz...). Entonces, Setién refrescó bien a su equipo, apareció Lo Celso para dejar muestra de su calidad el tiempo que estuvo en el campo, y Sergio León, para dotar de más presencia al ataque bético que su compañero Sanabria. Sin embargo, la pólvora siguió mojada. Al final, el botín del Betis fue un punto, con mejores sensaciones atrás que en ataque. Un plan con una doble lectura.

DEFENSA

El Betis salió con su habitual dibujo de tres centrales, con Guardado y Canales en el doble pivote, Boudebouz e Inui por delante y Sanabria arriba. Con el control de la posesión (en el minuto 20 llegó a ser de un 80% para los verdiblancos) de los verdiblancos, el Valencia (su dibujo fue el clásico 4-4-2) apenas creó peligro, salvo en alguna contra aislada. Además, el Betis juntó bien la línea defensiva con los cuatro hombres del centro del campo, tapándole los espacios al Valencia por el centro y las bandas. A esto hay que sumarle el gran papel de los tres centrales, sobre todo de Bartra, y Sidnei, en la anticipación a Rodrigo y Guedes, que bajaban continuamente a recibir para conectar con Gameiro y, después, también con Batshuayi. Así, a nivel defensivo, el Betis hizo un buen papel en Mestalla.

ATAQUE

Pese a la posesión, el Betis generó pocas oportunidades claras. Así, Boudebouz fue el mejor arriba hasta que por su físico desapareció en la segunda parte. Filtró un gran balón a Inui, que no lo aprovechó con todo a favor y, además, también fue de más a menos en el partido hasta que fue cambiado. La otra vía de penetración bética fue Júnior, mucho más valiente en ataque que Francis, que sólo apareció algo tras el descanso. En la segunda parte, el partido entró en una fase de ida y vuelta, y entonces se echó en falta más mordiente al Betis, más punch, pese a la voluntad de un Sergio León que aportó mucho más que Sanabria. También apareció Lo Celso intentando filtrar algún balón arriba, pero por tercer partido, de cuatro, el Betis no marcó.

VIRTUDES

El Betis fue un equipo reconocible, con una idea de juego definida, y una defensa muy segura.

TALÓN DE AQUILES

La falta de gol y de generar mucho más en ataque.