El espejo mide la altura

El Betis de Manuel Pellegrini ha ido subiendo peldaños en la Liga. La positiva dinámica de 2021 y los 10 puntos de 12 posible sumados en las últimas cuatro jornadas de Liga han confirmado al equipo verdiblanco como claro aspirante a la zona noble, un lugar en el que el Villarreal, su rival de esta tarde en La Cerámica, lleva instalado bastante tiempo.

Tras mostrarse el Betis muy superior a equipos de la zona media, el equipo de Unai Emery supondrá un examen de nivel. Aunque la pasada campaña finalizase por detrás en la tabla, el Villarreal es el actual campeón de la Liga Europa, esa competición que tanta ilusión está generando en Heliópolis, y un equipo que se ha reforzado con la intención de repetir en la Champions por la vía de la Liga.

Acude el Betis con ganas de medirse a un rival directo, como también lo calificó el propio Emery. Ha conseguido Pellegrini que su ambición y exigencia impregne el vestuario bético. La habitual euforia que se instalaba en el equipo bético tras cada victoria ha ido desapareciendo con esa sana costumbre de ganar y ganar, que incluso ha aumentado el hambre de triunfos de un club que necesitaba ese mensaje desde su banquillo.

También tiene el técnico bético una motivación especial ante el Villarreal, el primer equipo que apostó por él en Europa y donde también dejó un grato recuerdo por el fútbol y los logros que fue consiguiendo en un club recién llegado a la élite. Existen diferencias entre aquel Villarreal y este Betis que está ahormando Pellegrini, pero los objetivos del técnico pasan por colocarlo tan alto como llegó entonces, y para eso se hace necesario ganar en escenarios como La Cerámica.

Insistirá el entrenador chileno en ese manejo de la plantilla que tan buen resultado le viene dando en la Liga y en Europa. La política de rotaciones en las alineaciones le ha permitido mantener una alta intensidad en el juego, a la vez que todos los futbolistas se sienten partícipes, lo que genera más competencia. Si en Budapest realizó nueve cambios en el once inicial, ante el Villarreal volverán a escena jugadores principales como Bellerín, Guido Rodríguez, William Carvalho o Willian José.

Sin el lesionado Canales, a quien Pellegrini quiere a tope después del parón liguero, el juego del Betis se focalizará en William Carvalho, Fekir y Willian José, ese trío que se encuentra en plena forma y que ya ofreciese un recital de fútbol en el último encuentro ante el Getafe.

La calidad del Villarreal está un punto por encima de los últimos rivales béticos. Aunque le está costando arrancar en la Liga, en la que permanece invicto pero sólo ha sumado una victoria en seis partidos, los de Unai Emery disponen de un amplio repertorio para generar fútbol tanto por dentro como por las bandas.

Ni la baja confirmada de Gerard Moreno ni la más que probable de Paco Alcácer restan potencial a un equipo que dispone de Danjuma y Dia, dos fichajes de este verano, y Yéremi Pino, ese internacional de nuevo cuño que ya está confirmando todo lo que apuntó el pasado año.

Con el recuerdo de la victoria en su última visita, con golazo de Fekir incluido, el Betis quiere dar un paso más en sus aspiraciones ante un Villarreal que está diseñado para pelear entre los mejores de la Liga. "Es un señor partido", indicó Emery, que le otorga al cuadro verdiblanco ese cartel de equipo europeo y que avisó de su potencial ofensivo. El Villarreal que dirige el vasco es casi un espejo en el que mirarse para este Betis de las tres competiciones, que quiere seguir añadiendo muescas al plan de su entrenador.