El fútbol pasa por ganar

La mala dinámica de resultados del Betis, con una sola victoria desde la última pausa de selecciones, lo obliga a reaccionar de manera inmediata. Los tres puntos ante el Levante no sólo son necesarios para mantener las opciones matemáticas de llegar a esa séptima posición que podría otorgar plaza continental sino también por la propia sensación de volver a ganar, el fin último para el que se compite en el fútbol profesional.

Ya no se trata del estilo de juego de este Betis de Quique Setién, que puede contar con partidarios y detractores como con cualquier otro, sino que se trata de sumar de tres en tres para que el equipo verdiblanco finalice la temporada en una posición acorde a su alta inversión. Aunque el proyecto deportivo tenga como horizonte el medio plazo, los resultados del presente también marcarán algunas de las decisiones del futuro, de ahí que Setién necesite recuperar una versión competitiva de los suyos para alejar el pesimismo que se ha instalado entre los aficionados béticos.

La sucesión de mensajes de los últimos meses ha ido rebajando las perspectivas del equipo hasta caer en un conformismo que ha enrarecido el ambiente. De soñar con la final copera en el Benito Villamarín o con avanzar en la competición europea se pasó a pelear por la cuarta plaza; luego llegaría el ajuste para buscar una plaza directa en la Liga Europa y tras las dos últimas derrota ante rivales directos como el Sevilla y el Valencia el objetivo se ha marcado en esa séptima plaza que permitiría repetir en Europa y que elevaría la nota final cuando toque hacer balance. Las perspectivas con una derrota ante este Levante de Paco López dejaría muy tocado el crédito de Setién y con el Betis sin apenas objetivos para encarar las cuatro últimas jornadas del campeonato, un escenario imprevisto para esta campaña del crecimiento.

Si el Betis acude obligado a la cita de esta noche en el Ciutat de Valencia más urgencias presenta su rival, ese Levante que dirige Paco López y al que nueve jornadas sin conocer la victoria, con cuatro empates y cinco derrotas, lo ha metido de lleno en la pelea por la permanencia.

La debilidad defensiva del conjunto granota, el más goleado de Primera tras encajar 61 tantos, aparece como ese punto débil que deben aprovechar los verdiblancos para ahondar en la herida. Ni la defensa de tres centrales que viene empleando Paco López ha servido para paliar ese déficit granota, sobre todo por su apuesta por un centro del campo de buen manejo del balón, con Campaña y Bardhi, pero de escasa capacidad de recuperación.

Realizará cambios Setién en el once, tanto obligados por las ausencias de Feddal y Lo Celso, como por la necesidad de refrescar un once que realizó un gran esfuerzo ante el Valencia. Con la duda de Júnior en el carril izquierdo, después de que el canterano arrastre molestias en la pierna derecha, lo que podría retrasar de nuevo a Tello, sí parece segura la presencia de Canales en el centro del campo. El cántabro se ha ejercitado con el equipo en los dos entrenamientos de esta semana y su presencia se antoja incluso más necesaria ante las bajas de William Carvalho y Lo Celso.

La otra novedad de Setién apunta a la delantera, donde el técnico le buscaría a Jesé un acompañante más de área como Loren para intentar buscar esa mejoría ofensiva que le viene demandando a su equipo en las últimas jornadas.

Ya sea con la habitual defensa de tres centrales o con la línea de cuatro que empleó ante el Valencia, el Betis sí mantendrá su fidelidad al estilo para garantizar la posesión del balón ante un rival que, en principio, lo esperará replegado en campo propio. El precedente de la primera vuelta, esa lejana primera jornada de la Liga por esos condicionantes del calendario asimétrico, apuntan a que los granotas tratarán de aprovechar la velocidad de Jason y Morales para sorprender a los verdiblancos con rápidas transiciones.

Ha sido el estadio levantinista un campo propicio en los últimos años para el Betis, que ha vencido en sus tres últimas visitas, un precedente que debe servir para elevar la moral de una tropa que quedó tocada tras las últimas derrotas. La séptima plaza continúa a tres puntos a falta de cinco partidos, aunque las únicas cuentas para el cuadro heliopolitano pasan por ganar al Levante. Así es el fútbol profesional, como bien sabe Setién cuando le toca negociar un contrato.