Ahora sólo toca fútbol

Sevilla/Acabada la Junta General de accionistas sin sobresaltos en el puesto de mando, pese al aumento de la masa accionarial crítica con los dirigentes, al Betis le toca centrarse en el fútbol. Si como Sociedad Anónima el consejo de administración dice haber cumplido con la mayor parte de su decálogo, en la parte deportiva, esa D específica del fútbol, el equipo verdiblanco necesita mejorar su pobre cuenta de resultados. Y ante el Cádiz, además, se juega despejar el horizonte y poder mirar al futuro con más optimismo después de que la derrota en Granada, con dos goles encajados en apenas 20 minutos, hiciera resucitar los fantasmas que han rodeado al equipo en los últimos tiempos.

A esa falta de regularidad de los heliopolitanos se le añade la acumulación de esfuerzos con el apretado calendario entre la Liga y la Copa del Rey, aunque al menos Manuel Pellegrini recibió ayer la buena noticia de que podrá contar hoy con Guido Rodríguez. Competición indultó al argentino, al entender que no existió contacto con Luis Suárez en la jugada que originó el penalti del 1-0 en Granada, por lo que éste formará junto a Guardado, después de que William Carvalho confirmase su ausencia para varias semanas por una rotura muscular. También habrá cambios en la zaga, con las bajas de Emerson por sanción y Bartra por lesión, lo que provocará los regresos de Montoya y Mandi, mientras que Álex Moreno podría entrar por un Miranda que ha disputado los dos últimos choques.

Con esta sucesión de acontecimientos, Pellegrini le ha dado vueltas al posible once aunque sí con una idea clara de lo que quiere de su equipo sobre el césped. Pretende el técnico chileno que el Betis recupere esa versión que exhibió por ejemplo ante el Elche en Heliópolis, con una presión en campo rival y una rápida circulación de la pelota para desarbolar a la poblada defensa rival. Espera el preparador bético a un Cádiz parapetado en campo propio, que cierre filas y minimice espacios, de ahí que la presencia de Joaquín, sin minutos en Granada para que hoy tuviera piernas frescas, y Tello, de nuevo entonado cuando saltó al terreno de juego, se antoje necesaria para abrir el campo y generarle problemas al equipo gaditano.

También se espera más de Fekir. El francés dio un paso adelante en su compromiso en Granada, aunque la vigilancia a la que fue sometido cuando retrasó su posición para entrar en juego, le quitó peligro cerca del área rival, esa zona en la que Pellegrini lo quiere durante más minutos de los partidos.

Ese desequilibrio que debe aportar Fekir parece imprescindible para romper la previsible muralla amarilla. Álvaro Cervera, el exitoso técnico del Cádiz, quiere que su equipo recupere esa excelencia defensiva que lució durante el arranque del campeonato. Los seis goles encajados ante el Celta y el Getafe han provocado que el entrenador insista a su equipo en la necesidad de aumentar el compromiso defensivo como premisa para que el Cádiz pueda enseñar esa versión competitiva que había tenido sobre todo como visitante. Las victorias en San Mamés ante el Athletic y Valdebebas ante el Real Madrid quedarán para el recuerdo de la afición cadista, pero todavía queda mucha Liga por delante para conseguir los objetivos marcados.

En el último partido del año en el Benito Villamarín, que no se abrirá más hasta el derbi del 2 de enero, el Betis necesita volver a una dinámica ganadora. La posibilidad de contar con Guido Rodríguez alivió los planes de Pellegrini, que tiene claro que su equipo necesita fútbol para cambiar la percepción del entorno.