La energía de la ilusión

Sevilla/Si los aficionados continúan saboreando la clasificación para la final de la Copa del Rey 17 años después, el Betis de Manuel Pellegrini apenas ha tenido tiempo para el disfrute. Las obligaciones de un equipo que disputa tres competiciones le colocan otro duelo de alto voltaje en el calendario, con la visita de un Atlético de Madrid que quiere robarle esa plaza de Liga de Campeones que los heliopolitanos llevan ocupando desde hace once jornadas.

Acuden ambos equipos con unos prolegómenos bien distintos. En el lado bético, Pellegrini apenas ha contado con tiempo para prepararlo, tras jugar el jueves por la noche un exigente duelo copero ante el Rayo. Además, el técnico tiene el problema añadido de las ausencias, después de que Héctor Bellerín y Álex Moreno, que apuntaban al once, no pudieran entrar en la lista y se sumasen a la baja por sanción de Sergio Canales.

La principal duda del técnico se encuentra en el lateral izquierdo. Sin Álex Moreno ni Miranda, el chileno no cuenta con un jugador específico para ese puesto, aunque sí cuenta con las alternativas de Sabaly y Guardado, quienes ya han jugado en su carrera en esa posición. Si finalmente el francés es el elegido, la incógnita se trasladaría al lateral diestro, donde Aitor Ruibal o Bartra se verían obligados a adaptarse para frenar a Lodi, el hombre de moda en el Atlético.

A esas ausencias se añade el desgaste acumulado en este último mes, por lo que Pellegrini buscará piernas frescas para compensar ese cansancio físico y mental del equipo. Jugadores como Paul, Joaquín, Aitor Ruibal o Guardado están llamados a participar en el choque ante un Atlético que ha preparado el duelo como una final.

El inesperado tropiezo ante el Levante, en ese partido comodín con el que contaba el Atlético, supuso un punto de inflexión. Simeone, acompañado por los dirigentes, se reunió con su plantilla para solicitar un esfuerzo en una Liga de 14 partidos, los que faltaban en aquel momento, para conseguir un puesto de Liga de Campeones, el gran objetivo colchonero cada año. El cónclave dio sus frutos y el Atlético ha sumado dos victorias seguidas ante Osasuna y Celta, que lo han situado a un solo punto del Betis. Además, Simeone ha encontrado alternativas en jugadores que parecían olvidados como Lodi, Herrera o Vrsaljko. Los otrora indiscutibles Luis Suárez o Griezmann aparecen ahora como suplentes de lujo por si las cosas no funcionan, después de que Joao Félix y Correa se hayan asentado como la pareja de ataque.

Eso sí, el Atlético ha perdido esa fiabilidad que lo hizo tan reconocible en otro tiempos. Hasta el propio Oblak aparece esta temporada más vulnerable que nunca, a lo que se añaden las ausencias en la zona defensiva, donde Simeone no podrá contar con los centrales Savic y Mario Hermoso ni con el centrocampista Kondogbia, otro de los que se sumó a la revolución de las últimas semanas.

Pero a Pellegrini tampoco le importa demasiado la configuración del rival. El chileno se centra en encontrar un once de garantías, en el que la energía de la ilusión cubra ese desgaste acumulado en unas últimas semanas que han disparado la ilusión del beticismo. No se conforma el entrenador con la presencia en la final de la Copa del Rey y quiere que su equipo defienda esa plaza de Champions que ocupa tras cruzar los dos primeros tercios del campeonato.