La residencia de mayores de Cazalla se podría habilitar como centro de día para discapacitados
A pesar de la campaña que distintos colectivos sociales de Cazalla de la Sierra están realizando para que la residencia de mayores vuelva a abrir con esa misma función, la Diputación lo sigue descartando, aludiendo a que el viejo edificio no reúne las condiciones para poder acreditarse como tal, ni aunque se hiciera una inversión millonaria. La diputada de Cohesión Social, Lidia Ferreras, y la portavoz del gobierno socialista, Trinidad Argota, apuntaron ayer que se está estudiando la posibilidad de habilitarlo como un centro de día y de rehabilitación para personas discapacitadas, pero sin plazas residenciales, que son más difíciles de adaptar. La semana pasada, técnicos de la Junta visitaron el edificio para evaluar sus condiciones. El proyecto está en una fase inicial pero, si la administración andaluza da su visto bueno, no tendría por qué demorarse mucho, destacaron.
Con ese servicio, se atendería a personas discapacitadas de toda la comarca de la Sierra Norte de Sevilla, que hasta el verano pasado y en virtud de un convenio que existía entre la Junta de Andalucía y la de Extremadura acudían a un centro de Llerena (Badajoz).
La antigua residencia de Cazalla -en un edificio propiedad del Ayuntamiento cedido a la Diputación en 1975- cerró en 2015. Desde entonces, funciona como un centro polivalente, con un comedor que reparte comida a personas mayores del municipio, espacios para talleres y asociaciones. No obstante, en el municipio se está luchando por que se mantenga como residencia de mayores.
En la presentación ayer del Plan de Cohesión Social para 2018, se destacó que la demanda de plazas en residencias de mayores se está reduciendo y que cada vez más los propios usuarios y las familias apuestan por otros servicios, como la ayuda a domicilio o la teleasistencia, que les ayuden a pasar esa etapa de la vida en sus hogares. La Diputación tiene residencias propias en la capital y en Marchena.
No hay comentarios