La juez requiere a Ortega Cano para retirarle el carné de conducir
La familia de Carlos Parra se opone a que se suspenda el ingreso en prisión porque el torero sigue sin "mostrar arrepentimiento".
El juzgado de lo Penal número 6 de Sevilla ha declarado firme la sentencia que condenó al torero José Ortega Cano por el accidente en el que murió Carlos Parra y ha comenzado a ejecutar la sentencia en lo que se refiere a la condena de privación del carné de conducir, por lo que ha requerido al acusado para proceder a la liquidación de la condena de tres años y medio sin derecho a conducir.
En un auto que tiene fecha del 20 de diciembre, pero que ha sido notificado ahora a las partes personadas, la juez Eva María Medina declara firme la sentencia dictada por la Sección Primera de la Audiencia de Sevilla que mantuvo la condena de dos años y medio de cárcel para José Ortega Cano, aunque le consideró culpable de un tercer delito contra la Seguridad Vial, por conducir bajo los efectos del alcohol tras dar por válida la prueba realizada sobre la muestra de sangre extraída al acusado con fines terapéuticos a su ingreso en el hospital Virgen Macarena.
Como la defensa de Ortega Cano ha pedido la suspensión de la ejecución de la condena de prisión hasta que se resuelva el indulto, la juez ha acordado dar un plazo de tres días a la Fiscalía y las demás acusaciones para que se pronuncien sobre esta pretensión.
En la misma resolución, la juez acuerda requerir a Ortega Cano para proceder a liquidar la condena de tres años y medio de privación del derecho a conducir -lo que implica la pérdida de vigencia del permiso-, pero antes ha pedido a su abogado que aporte el domicilio del torero, ya que al juzgado "no le consta", lo que puede obedecer a la reciente venta, el pasado verano, de la finca Yerbabuena de Castilblanco de los Arroyos, donde tenía fijado su domicilio.
En cuanto a la suspensión de la ejecución de la condena, la Fiscalía de Sevilla ya se ha opuesto a la misma por la duración de la pena impuesta, así como por el hecho de que el torero ha sido condenado por tres delitos -homicidio imprudente, conducción temeraria y bajo los efectos del alcohol- y por el grave perjuicio ocasionado, en alusión a la muerte del vecino de Castilblanco Carlos Parra Castillo.
Los abogados Luis y Andrés Avelino Romero, que representan a la familia de la víctima, explicaron ayer a este periódico que en los próximos días también presentarán un escrito en el juzgado en el que, al igual que el Ministerio Público, se opondrán a que pueda suspenderse el ingreso en la cárcel del torero mientras se tramita el indulto. Los letrados de la acusación insistieron en que, además de los argumentos expuestos por la Fiscalía, este caso ha producido una "grave alarma social y sería poco ejemplificante que el Gobierno concediera el indulto" al torero, por lo que precisaron que el acusado debería ingresar en prisión para comenzar a cumplir la condena.
Para los abogados de la acusación particular hay otro elemento fundamental que actúa en contra del posible indulto a Ortega Cano y es que el acusado sigue sin "mostrar arrepentimiento ni reconocer nada", hasta el punto de que parece que "el coche iba teledirigido", ironizó Luis Romero, en alusión a las explicaciones que ha dado recientemente el torero sobre cómo se produjo el accidente y su insistencia en que la noche del accidente no había ingerido ninguna bebida alcohólica.
Los abogados de la acusación particular recordaron que uno de los aspectos que la Dirección General de Indultos del Ministerio de Justicia debe valorar a la hora de conceder esta medida de gracia es el arrepentimiento del reo, algo que, según consideran, sigue sin producirse en este caso a pesar de que Ortega Cano haya dicho que se acuerda con frecuencia del fallecido.
Con esta actitud, aseveraron los letrados, se está "alargando el dolor de la familia" de Carlos Parra, al tiempo que no han dudado en calificar de "estratagema la visita del acusado a la clínica Rúber" para someterse a una intervención cardíaca.
Una vez que la juez disponga de la opinión de todas las partes sobre la suspensión de la ejecución de la condena deberá dictar un auto resolviendo la cuestión, aunque esta resolución puede ser de nuevo objeto de un recurso ante la Audiencia de Sevilla, lo que supone que el posible ingreso en prisión del matador se dilatará algún tiempo todavía.
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