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La plantilla de la base amenaza con ir a la huelga si no se detiene el ERE

Morón de la Frontera

La convocatoria está condicionada a que el Gobierno de España y el de EEUU alcancen un acuerdo. La dirección de VBR y el comité fijarán el lunes el calendario de negociaciones.

Un avión militar despega de la base estadounidense de Morón de la Frontera.
Diego J. Geniz

08 de agosto 2014 - 05:01

Acuerdo o huelga. Los trabajadore españoles de la base norteamericana de Morón de la Frontera lo tienen claro. Si a principios de septiembre el Gobierno de España no ha conseguido que el de Estados Unidos deponga su actitud en cuanto a la merma de servicios civiles en este aeródromo, se convocará un paro que afectará a la actividad en dicho recinto en el que la empresa VBR ha anunciado un expediente de regulación de empleo (ERE) que afecta, en principio, a 55 empleados de tres departamentos de la zona de pista.

Ésta fue la decisión que se tomó ayer en la asamblea de trabajadores convocada por el comité de empresa. Se llevó a cabo dos días después del anuncio del nuevo ERE, el tercero en cuatro años y que de efectuarse supondría dejar casi a la mitad de la plantilla española con la que contaba la base en 2010. El portavoz del comité, Javier Domínguez, aseguró a este periódico que a dicho encuentro acudieron unos 200 empleados, debido a que buena parte se encuentra de vacaciones o estaban en sus puestos de trabajo. El hecho de que el nuevo expediente se haya anunciado en pleno periodo estival fue uno de los motivos de crítica de los trabajadores, que consideran que así se intenta "disminuir" la presión por parte de la plantilla.

En dicha reunión se acordó que todas las actuaciones que tomen quedarán concidionadas a los resultados de las gestiones que realice el Ministerio de Defensa. Según Domínguez, los trabajadores españoles de la base "lo tienen claro". "Es el Gobierno de España el que ha de mover ficha, pues la decisión de prescindir de servicios sociales en la zona de pista es del Gobierno de Estados Unidos, pues la compañía VBR sólo es una intermediaria que debe ejecutar órdenes ministeriales", incide el portavoz del comité.

En este sentido, hay que recordar que los despidos que se han venido produciendo desde 2010 han afectado a quienes trabajan en pista. Dicha merma, aunque en un principio la compañía encargada de gestionar los servicios sociales la atribuyó a la bajada de la actividad en la base, se suple con militares estadounidenses. Incluso, según apuntan los trabajadores, se han contratado a antiguos empleados afectados por los dos ERE anteriores para seguir con su función pero en peores condiciones laborales.

"Intentan hacer el mismo o más trabajo que antes pero con un coste más reducido", son algunos de los comentarios que se han escuchado estos días en municipios como El Coronil o el propio Morón, donde reside buena parte de los trabajadores españoles de la base.

Lo cierto es que en tres años se han puesto en la calle a 185 empleados de una plantilla que a finales de 2010 alcanzaba los 594. Si finalmente se suman los 55 previstos en el nuevo ERE, quedará casi la mitad de la plantilla de entonces. Este "desmantelamiento", según el comité, sólo responde a directrices del Gobierno estadounidense, de ahí que pidieran en una reunión mantenida en julio en el ministerio que dirige Pedro Morenés que se "intercediera" ante la Administración de Obama para saber el motivo de dicho recorte en zona de pista e intentar frenarlo.

Con esta decisión, los trabajadores hacen responsable de su futuro laboral al Gobierno de España, pues consideran que de sus negociaciones depende de que el ERE se detenga. De nada parece servir los encuentros que mantendrán con la compañía VBR, pese a que el lunes se sentarán con la dirección para fijar un calendario de encuentros. Si Morenés no consigue un cambio en el ERE, habrá huelga en la base a la vuelta de las vacaciones.

PP y PSOE se echan en cara las responsabilidades

El cruce de acusaciones políticas por el nuevo ERE en la base de Morón continúa. El secretario de Empleo del PSOE de Sevilla, Manuel García Benítez, criticó ayer "la pasividad y desahogo" con la que el Ejecutivo de Rajoy afronta el futuro de los trabajadores españoles del aeródromo. El dirigente socialista, que defendió el apoyo de su partido a estos empleados, anunció que el PSOE solicitará que el ministro de Defensa, Pedro Morenés, comparezca en sede parlamentaria. "Vamos a reclamarle al PP que exija a EEUU cumplir con los trabajadores". Por su parte, el PP de Sevilla ha acusado al PSOE de "politizar" el nuevo ERE y ha recordado que VBR sigue la "hoja de ruta" con la que consiguió el concurso para gestionar los servicios civiles de la base en 2010, "año en el que gobernaba el PSOE".

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