El gobierno local pide al Estado que se implique y evite los 228 despidos en Roca

R. P.

20 de diciembre 2012 - 05:01

alcalá de guadaíra/La portavoz del gobierno municipal de Alcalá de Guadaíra, María José Borge, ha reclamado que el Estado se implique en buscar una solución al problema de los 228 trabajadores de Roca que serán despedidos, ya que la empresa ha anunciado el cierre de sus instalaciones de Alcalá de Guadaíra.

Según Borge, el alcalde ha solicitado "unidad de todos" para buscar una solución factible a este asunto que no pase por el cierre y que "no está pidiendo otra cosa diferente a lo que ya solicitó en su día cuando se anunció un ERE, logrando que el propio ministro socialista de Trabajo, Celestino Corbacho, tomara cartas en el asunto".

"Es una buena noticia que el Partido Popular apoye a los trabajadores, aunque es inverosímil que el cierre de la factoría sea factible en buena parte a la reforma laboral que ha aprobado su propio partido en el Gobierno central, lo que nos deja un escaso margen de maniobra", añade.

Asimismo, muestra su sorpresa por la postura "totalmente demagógica e hipócrita" de la presidenta del PP de Alcalá de Guadaíra, Mari Carmen Rodríguez Hornillo, que por un lado apoyar a los trabajadores y, "por otro, muestra una excesiva cobardía a la hora de reclamar a sus compañeros de partido Mariano Rajoy y a su ministra Fátima Báñez que tomen cartas en el asunto, anteponiendo sus intereses políticos y personales al interés general de los trabajadores y alcalareños".

"Debería aprender de su compañero de partido y alcalde de Carmona, que ante el anuncio del despido de cinco trabajadores del Parador no ha dudado un solo segundo en reclamar una solución a Madrid", señala.

Por su parte, el PP de Alcalá de Guadaíra exige al alcalde Antonio Gutiérrez Limones un Pleno extraordinario en señal de apoyo a los trabajadores de Roca, al tiempo que le ha acusado de "deslealtad". Según el PP, cuando saltó la noticia del cierre de la factoría el gobierno y la oposición estaban en una reunión en la que se planteó celebrar un pleno municipal urgente y extraordinario. Sin embargo, el alcalde "salió corriendo para no perder la oportunidad de colgarse la medalla y exigir al Gobierno que le solucione los problemas que él tiene que arreglar". El PP ha solicitado una reunión con la dirección de la empresa Roca para tratar de buscar vías de solución al cierre de la fábrica de Alcalá.

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