Cuarto día sin clases en el colegio Santa Ana de la Puebla de Cazalla por falta de equipo directivo
El conflicto se origina en problemas de convivencia entre la dirección, la jefatura de estudios y el equipo docente
El 18 de junio el Consejo Escolar acordó la revocación de la directora por "incumplimientos y manipulaciones"
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El martes 10 de septiembre comenzaron las clases para Infantil y Primaria en toda Andalucía, menos en un colegio el municipio sevillano de la Puebla de Cazalla.
El motivo es que tanto las familias como la comunidad educativa del Colegio Santa Ana, se han rebelado y han iniciado una serie de protestas porque no cuentan con nadie para los directivos, ni para la jefatura de estudios.
Según las familias, el conflicto se origina inicialmente con la persona que ostentaba el puesto de la dirección del centro.
Cuatro días sin alumnos
De este modo, los alumnos no han recibido clases durante estos días del inicio del curso escolar, toda que vez que el recinto educativo ha acogido concentraciones que han reunido a las familias y a los docentes, y los alumnos no han asistido a las clases lectivas.
El colectivo de familias del alumnado explica que el principal problema del centro "es la inestabilidad de la plantilla".
Detallan en un manifiesto que "de sus 19 docentes actualmente se encuentran en activo tan solo cuatro definitivos, siendo el resto personal provisional o interino, que va cambiando cada año", apuntan.
Asimismo, describen una situación de la que responsabilizan a la fuera directora del centro: "la organización, funcionamiento y relaciones personales de la directora, cuyas decisiones arbitrarias lo único que hacen es perjudicar a la comunidad educativa"; hasta el punto de que "en los últimos tres años han pedido traslado a otros centros tres maestras con más de 20 años de antigüedad" en este colegio, detallan las familias. Todo ello por "la manipulación, el acoso y los enfrentamientos a los que se han visto sometidas", aseguran.
La directora, de baja
Las familias han indicado que en anterior curso , el consejo escolar incluso acordó por unanimidad el 18 de junio la revocación de la directora por sus "graves incumplimientos, engaños y manipulaciones", sin que la aludida estuviese presente porque "se cogió la baja", sumándose a la situación en la que ya incurría la jefa de estudios; con lo que la secretaria "tuvo que asumir todas las funciones de los tres cargos directivos y enfrentarse a un complicado cierre de año escolar" y "quedaron pendientes numerosas tareas administrativas ante la imposibilidad de contar con las firmas de todos los miembros del equipo directivo".
Según se detalla en el comunicado: "Comenzamos el nuevo curso 24/25 con la misma situación, un equipo directivo con un solo miembro, la secretaria. Esta situación no se puede sostener más en el tiempo, y más en un principio de año escolar y sin personal cualificado para resolver los importantes trámites que corresponden a este inicio de curso, trámites cuyos plazos acaban en el mes de septiembre, como gestiones administrativas, pago de facturas, firma de becas, actividades extraescolares, por lo que si no disponemos del personal necesario con potestad para llevarlas a cabo el centro y nuestros niños/as perderán estos recursos", apunta las familias, reclamando que la Administración educativa "resuelva esta situación" y dote de un equipo directivo completo al centro.
A la espera de que Educación asigne los puestos vacantes
De momento, según las familias, la directora "sigue estando de baja ocupando el cargo sin que pueda ser cesada y paralizando todo el proceso, impidiendo el normal funcionamiento" del colegio, donde este jueves ha sido celebrada una tercera concentración de protesta, de nuevo con la consigna de que los menores no entren a clase, extremo que se habría cumplido, según las familias.
Aunque este pasado miércoles a mediodía un grupo de los padres habría sido recibido por responsables de la Inspección Educativa en la Delegación Territorial de Desarrollo Educativo, en Sevilla, el colectivo expone que la Administración insiste en plantear "los mismos parches", asignando los cargos vacantes a funcionarios sin formación para ello, en lugar de plantear una solución definitiva. "No nos con formamos", ha dicho una portavoz de las familias.
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