La cerveza contra la sequía: Heineken retorna cada aña 1.000 millones de litros de agua a Doñana

Las cervezas de Heineken son sostenibles y tienen mucho que ver en la lucha contra la sequía. Esta es la única cervecera que retorna a su cuenca de origen el agua que hay en sus cervezas, en total, 1.900 millones de litros de agua cada año. Las zonas de actuación son Doñana, la Albufera y El Jarama. El acuerdo que se ha renovado con la Junta de Andalucía permite que el Proyecto Doñana continúe hasta el año 2026 como mínimo. El programa arrancó en 2016 y se ha convertido en una colaboración público-privado donde, además del gobierno autonómico está involucrada la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir y la ONG SEO/BirdLife. Con ellas se mantiene no sólo las cuatro lagunas incluidas en el programa: Dehesa de Abajo, Pardillas, San Lázaro y el Lince.

La inversión hasta la fecha ha sido de 370.000 euros y se irá ampliando hasta llegar al medio millón de euros. Con esta actuación, la cervecera retorna cada año en total más de 1.900 millones de litros en Andalucía, Valencia y Madrid. De ellos, mil millones en Andalucía, una cantidad certificada por la Universidad de Granada y DNV.

La directora de Asuntos Corporativos de Heineken España y presidenta de la Fundación Cruzcampo, Carmen Ponce, ha recordado que en la cervecera se trabaja "desde hace más de 20 años en la reducción del consumo de agua en la fábrica. De este modo, se ha conseguido un 41% de ahorro en la de Sevilla en 2023 que era el objetivo fijado en 2025. Esto supone 90 millones de litro0s, que es la cantidad que consume Sevilla en un año. Además de esta reducción en el consumo, todo el agua que se puede revertir es tratada y vertida en las cuencas de origen. Hay otra parte que no se puede revertir y la compensamos. En cada litro de cerveza se utiliza un litro y medio de agua. Un litro se queda en la botella, y medio se evapora. Esa cantidad de agua es la que calculamos para este tipo de proyectos con los que queremos contribuir al progreso de una tierra a la que nos unen 120 años de historia", asegura.

El acuerdo, que ha rubricado en la Dehesa de Abajo por parte de la Junta de Andalucía, Ramón Fernández-Pacheco, consejero de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul, es una colaboración público-privada. "En 2024 se van a destinar 15,4 millones de euros en los presupuestos de la comunidad para la conversación y restauración de los humedales, uno de los ecosistemas más importantes para la salud del planeta y aliado fundamental contra el cambio climático".

Se trata sobre todo, de garantizar y mejorar su funcionalidad hídrica y ecológica, y ahora la cervecera se ha centrado en mantener su estado para aprovechar bien las lluvias e incrementar el agua que almacenan. Durante el año hidrográfico en curso se ha recogido en la zona de la Dehesa de Abajo, más de 718 millones de litros, con lo que se ha contribuido a la mejora de hábitats de especies en vía de extinción como linces Y aves acuáticas como la cerceta pardilla. Además del agua, el acuerdo entre Heineken y la Junta incorpora algunas novedades como la instalación de palomares y refugios para murciélagos, un animal que según la ONU tiene un gran valor en la lucha contra el cambio climático, la recuperación de humedales y el control de las plagas de mosquitos.

El 95% de la cerveza es agua, por eso una de las prioridades de Heineken es este recurso, sobre todo en países con un elevado estrés hídrico como España. Desde el año 2008 se ha reducido un 41% el consumo de agua por litro de cerveza elaborado. Actualmente utiliza 2,9 litros y seguirá trabajando para hacer que esta cifra baje hasta los 2,6 litros en 2025, prácticamente la mitad de la que usaba en 2008 84,9 litros). Un objetivo que ya ha cumplido en su fábrica de Sevilla y que aspira conseguir a nivel nacional cinco años antes de la fecha que se ha marcado Heineken en España.

Es importante también el aspecto de circularidad de este proyecto de la que se aprovechan otras industrias cercanas, agricultores y la propia naturaleza al poder reutilizar el agua tratada. Este proyecto es, sobre todo, por el agua que la cervecera no puede dejar de consumir: la que contiene la propia cerveza (1 litro) y la que se evapora durante el proceso de fabricación (0,5 litros). Gracias a estas actuaciones en Doñana, la Albufera y la ribera del Jarama, retorna a la cuenca más de 1.900 millones de litros de agua al año. Una cantidad superior al objetivo que se había fijado, 1.500 millones, y que en años hidrográficos como el actual ya ha alcanzado los 1.432 millones de litros en apenas cinco meses.