El Puerto no logra evitar el concurso de acreedores pero sí su disolución

Los principales acreedores son la Seguridad Social y Hacienda, con los que ya se está negociando

Una imagen de Puerto Gelves, que ha perdido muchos amarres por la falta de inversión.
Una imagen de Puerto Gelves, que ha perdido muchos amarres por la falta de inversión.
Trinidad Perdiguero

20 de marzo 2016 - 05:01

La empresa municipal que gestiona Puerto Gelves está formalmente en concurso de acreedores desde finales de 2015, lo que implica que su gestión depende de un administrador judicial que tendrá que tomar decisiones para afrontar la deuda. La alcaldesa, Isabel Herrera (PSOE), ha explicado que en el plazo de cuatro meses que prevé la ley desde que se declaró el preconcurso, con el anterior gobierno del PP, no ha habido tiempo para enderezar una situación que es fruto de años de "dejadez y ausencia de gestión", insiste. Aun así, quitó hierro al concurso y lo que implica y recordó que en estos meses sí se ha conseguido sacar a la empresa de la situación de obligada disolución, con lo que se confía en que siga adelante después, con una gestión eficaz de sus propios recursos.

El concurso de acreedores facilitará incluso algunas gestiones pendientes. Así, se han desbloqueado las cuentas. El impago que acumula con la Agencia Tributaria y la Seguridad Social implicaba el embargo de los ingresos, con lo que había problemas para pagar las nóminas. También se pretende que el concurso ayude a alcanzar a un acuerdo con los principales acreedores que son la Agencia Tributaria -se deben cerca de 700.000 euros, una cantidad que se ha ido acumulando desde 2005- y la Seguridad Social, con la que, desde 2013, se acumula una deuda de 260.000 euros. Según la edil, están a la espera de que Hacienda ponga un calendario de pagos que permita saldar esa deuda. El hecho de que no haya otros acreedores importantes facilita las cosas.

El objetivo es mantener el modelo de una empresa municipal. Herrera defiende que es posible con una buena gestión y recuerda que la morosidad en el cobro de los amarres rondaba el 90% y había barcos que llevaban hasta ocho años sin abonarlo. La administradora judicial sí que ha iniciado los procedimientos para normalizar ese pago. La edil admite que esa ausencia de ingresos, de gestión y de inversión y mantenimiento en el propio Puerto ha provocado un "deterioro importante en la imagen de las instalaciones" y se ha perdido mucho negocio, que se recupera muy lentamente. En el caso de los amarres, se ha lanzado una oferta para intentar que remonten. Recuperar esa imagen es también uno de los objetivos del plan de viabilidad en el que trabaja una empresa específicamente -fue contratada en el anterior mandato de cara a la disolución, el nuevo gobierno la ha mantenido con otro cometido- con el apoyo municipal.

Todo pasa por una mejora de infraestructuras -para lo que la alcaldesa dice tener el compromiso de otras administraciones-, por la futura conexión con otros municipios de la ribera en rutas culturales y gastronómicas y por la creación de un viaje en catamarán por la zona, en el que trabaja Prodetur. Se quiere celebrar de nuevo la feria gastronómica que arrancó el año pasado y, en mayo, una feria náutica de ocasión para recuperar en 2017 la feria náutica que ya tuvo Puerto Gelves durante años.

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