Placas solares toman el relevo a cultivos de secano en Guillena

Los huertos solares pasarán a ser, en un plazo de tiempo muy breve, un elemento habitual del paisaje de muchos pueblos de Sevilla. Como ejemplo está Guillena, en la parte de su término municipal más llana y donde, hasta ahora, dominaban los cultivos de secano. Es una de las localidades sevillanas que concentra, en estos momentos, más proyectos de plantas solares fotovoltaicas en ejecución.

En concreto, están en construcción dos de ellas y hay otras dos en una fase avanzada de tramitación. En total, suman hasta 250 MW (más que la potencia instalada actualmente y en funcionamiento en toda Sevilla).

A su implantación ha ayudado que Guillena cuente con subestaciones eléctricas cercanas que facilitan la evacuación de la energía que se producirá.

El más importante de estos proyectos es una planta solar fotovoltaica de 110 MW que está ya en ejecución, después de tres años de trámite ante el Gobierno de la nación, porque la ley marca que todos los proyectos de este tipo que superan los 50 MW de potencia dependen para su tramitación de Madrid y no de la Junta. La planta ha sido adquirida recientemente por un grupo de inversión alemán en energías renovables, Luxcara, pero la construye Solarig.

Según ha avanzado el alcalde, Lorenzo Medina, en estos momentos las obras están al 50%. El plazo de ejecución es de entre 18 y 20 meses y podrían estar listas para agosto del año que viene. La inversión supera los 80 millones de euros.

Esta planta ocupa una extensión de 270 hectáreas, entre el núcleo urbano principal de Guillena y Las Pajanosas. Las obras son visibles ya desde la carretera que los une, desde donde se verán también las futuras placas solares.

Aunque durante su construcción tendrá picos de hasta 400 personas trabajando, una vez que esté en funcionamiento se estima que la planta que generará entre 20 y 22 puestos de trabajo fijo.

Medina destaca que para amarrar ésta y otras de las iniciativas de plantas de energía solar fotovoltaica que han llegado a Guillena, el Consistorio modificó en 2013 sus ordenanzas fiscales, de forma que se incluyeron rebajas de hasta el 60% del Impuesto de Construcciones y Obras (ICIO) a proyectos de este tipo que contaran con mano de obra local y proveedores locales durante su construcción. A raíz de ese gran proyecto, han llegado otros a Guillena, que además cuenta con importantes líneas de media y alta tensión.

El segundo proyecto que está en construcción tiene una potencia de 40 MW y una inversión de unos 40 millones de euros. En este caso y en tanto que forma parte de la subasta estatal de energía, debe estar terminado para el 31 de diciembre y se está ejecutando en el cruce de Guillena con la A-66, a la entrada del municipio. Las obras son visibles desde la autovía. En la construcción de esta segunda planta están trabajando unas 75 personas de Guillena.

Una vez finalizada la obra el número se reduce de forma notable, hasta la docena. Según se estima, la vida útil de la planta será por 35 años. La empresa de esta planta, Calaspasol Energía S.L.U., tiene otro proyecto colindante al que ya está en ejecución, de otros 40 MW.

Precisamente, en el último Pleno del Consistorio se aprobó la declaración de especial interés y utilidad municipal del mismo, con una bonificación del 30% en el ICIO. Se estima que durante la ejecución generará unos 450 empleos.

El cuarto huerto solar que está tramitándose, promovido por Hive Energy, es de 49 MW –los justos para que la tramitación se pueda hacer a través de la administración autonómica y no la estatal–, cuyos propietarios pretenden empezar las obras en septiembre. Se ubica en terrenos situados junto a la carretera de Guillena a Burguillos.