IU de Sevilla sale en defensa de la huelga del SAT y ataca a la Junta

Las tensiones que hay en el seno de IU de Sevilla -donde parte de su militancia y cargos públicos cuestionan el pacto con el PSOE en la Junta- han vuelto a quedar en evidencia a raíz de la huelga de basura que el SAT declaró hace 36 días en El Coronil y que ha provocado una situación de riesgo sanitario sin precedentes en la comunidad autónoma. El coordinador provincial de IU, Manuel Gutiérrez Arregui, lanzó ayer un comunicado en el que reprocha al presidente de la Junta, José Antonio Griñán, las declaraciones que realizó el 8 de febrero, en las que se refería a la huelga como una "coacción".

"No contribuyen a la búsqueda de un final negociado al conflicto y perturban la paz social que dice perseguir el señor Griñán", destacó, y subrayó que "acusar a un sindicato de coaccionar sólo busca criminalizar el conflicto social, actuando de parte en vez de fomentar el diálogo y la negociación". Todo ello resulta "más grave", dijo Arregui, cuando "las declaraciones no las hace como responsable político de un partido, sino como presidente de todos los andaluces". El posicionamiento del coordinador de IU de Sevilla llega después de que otros cargos de la formación, como el representante en la Diputación Manuel Rodríguez Guillén, miembro del SAT, hayan reprochado la "poca cobertura" que la dirección andaluza de IU y las instituciones en las que está presente están dando a sus ediles en el municipio, que sí apoyan la controvertida huelga.

"Esta huelga se produce por un incumplimiento del alcalde, Jerónimo Guerrero (PSOE), que se comprometió públicamente a reactivar la bolsa de empleo tras un año de suspensión y doce de aplicación", recordó Arregui, aunque Guerrero insiste en que el decreto del PP que prohíbe la realización de contrataciones en la Administración sin nuevos fondos no se lo permite y que firmó un acuerdo con el comité de empresa para no realizar contratos y cubrir los puestos existentes con personal propio.

El gobierno local socialista seguía este martes a la espera de que los juzgados de lo social en los que ha solicitado que la protesta sea declarada ilegal -ninguno de los cinco miembros del comité de huelga forman parte de la empresa a la que afecta el conflicto, el Ayuntamiento- se pronuncien. El secretario general del SAT y ex alcalde de El Coronil, Diego Cañamero, esgrime que cuatro de los cinco trabajadores del servicio de limpieza urbana "son afiliados del SAT", según destacó a Europa Press, aunque ninguno ha secundado la huelga.

Cuatro de los cinco operarios están ya de baja por motivos psicológicos y no hay personal para que puedan funcionar los servicios mínimos hoy, el primer día en el que deberían salir después de que el lunes, entre un impresionante despliegue policial, con más de cien guardias civiles, operarios de la empresa pública Tragsa retiraran la basura acumulada para acabar con la situación de riesgo sanitario. El alcalde quiere que la misma empresa asuma los servicios mínimos y pone como condición al SAT que permita que se respeten un día para sentarse a negociar.

Pero Cañamero hace una interpretación restrictiva de esos servicios mínimos y considera que sólo debe recogerse la basura en los puntos cercanos a colegios, centro de salud, mercado y residencia de ancianos, cuando una aclaración realizada por la Consejería de Trabajo especifica que se debe recoger todo el pueblo en la medida que dé tiempo, en días alternos y sin que nunca queden sin recoger esos puntos sensibles. Se trata de unos servicios inusualmente amplios con los que la Junta atendió a la singularidad de la convocatoria de la huelga, que no partía de personal de la empresa.

También se pronunció este martes sobre el conflicto el PP de Sevilla, expresando su "apoyo" al alcalde y a los vecinos "por haber tenido que sufrir 34 días las consecuencias de la huelga, ante el más absoluto abandono del bipartito andaluz", destacó el secretario provincial, Eloy Carmona, quien ensalzó la actuación de la "subdelegación del Gobierno" y el operativo policial que preparó.