Amenaza al médico tras exigirle el resultado de una analítica que no se había realizado

Las agresiones al personal sanitario se ha cobrado recientemente una nueva víctima en la provincia de Sevilla. Ocurrió el pasado 31 de mayo en el centro de salud de Guillena donde un médico tuvo que hacer frente a las exigencias bajo coacciones y amenazas de una paciente que reclamaba el resultado de una analítica completa, cuando no era esa la prueba a la que había sido sometida.

Según denuncia el Sindicato Médico de Sevilla, la agresora irrumpió en la consulta y," golpeando la mesa con una botella grande de agua, solicitó que le entregaran los resultados de una analítica completa". Según reclamaba, esta analítica debía haber sido pedida por su médica, incluyendo una serología completa, sin embargo, fue cuando el médico que pasaba ese día consulta porque la doctora en cuestión no estaba le intentaba explicar que lo que se le había practicado era lo que se consideraba imprescindible para derivarla a una consulta especializada en el hospital, cuando la paciente montó en cólera y, "visiblemente alterada" insistió en sus exigencias "de forma violenta" hacia el facultativo, al que, igualmente, le reclamó que se le realizara "de inmediato" una intervención quirúrgica de cirugía menor, tal y como recoge el SMS en un comunicado.

Las mismas fuentes indican que la situación no llegó a más porque el médico logró pulsar la combinación de teclas del botón del pánico en su teclado, lo que hizo que varios compañeros, celadores y administrativos del centro de salud acudieran rápidamente. Situación que provocó las burlas de la paciente agresora, que, según el relato del SMS, "continuó vociferando, dando el beneplácito para que se quedaran los amiguitos del médico que habían acudido para que vieran quién era el que realmente estaba nervioso y violento".

La situación provocó un estado de ansiedad en el médico agredido que se vio obligado a tener que detener la consulta unos minutos y ser atendido por sus compañeros. "Desde entonces, se siente intranquilo, preocupado y en permanente estado de alerta, incluso en momentos de reposo en su casa, donde persiste el recuerdo de la amenaza y coacción constante de la agresora", apuntan desde el sindicato.

"A pesar de lo recogido en el actual Plan de Prevención y Atención de Agresiones del Sistema Sanitario Público de Andalucía, las agresiones continúan aumentando sin que el SAS ni la Consejería de Salud hagan nada por evitarlo", denuncia el Sindicato Médico de Sevilla, que aprovecha para poner en valor "la importante labor realizada por los interlocutores policiales sanitarios".