¡Oh, Fabio!
Luis Sánchez-Moliní
Esplendor del Palacio Real
Ayer, quizá un poco pronto, se hizo el ascua de luz en la ciudad y no sólo en la Sevilla de siempre, sino en barrios recónditos ya lucieron las luminarias que pregonan la Navidad, felizmente soslayado aquello del solsticio de invierno. En eso hemos ganado y nombrar las cosas por su nombre es algo que vuelve a estar vigente en la Casa Grande. Ahora bien, parece que el ascua de luz se ha encendido con bastante antelación y quizá hubiera sido más normal haber esperado al macropuente de la semana entrante. Sin duda, el afán lumínico de Abel Caballero, ese ex ministro socialista que rige el Ayuntamiento de Vigo, haya hecho metástasis en el resto del país, siendo muchos puntos de la piel de toro que pugnan por llegar antes y dotar de una luz rayana en cegadora. Y aquí no podíamos quedarnos atrás, claro que no.
También te puede interesar