Notas al margen
David Fernández
El problema del PSOE-A no es el candidato, es el discurso
En el recinto de la Expo 92 había un canal, un lago y hasta una esclusa entre el canal y el río Guadalquivir, el mismo tramo que hemos mimado como pista de remo en estos años. Buscando rentabilidad y uso apareció Isla Mágica, que se hizo a costa del lago. Un problema menos, pudo pensar alguien. Y durante más de treinta años, ya sin lago, el canal no fue un tema prioritario. En 2004 se planteó la candidatura olímpica de Sevilla y el recinto de la Expo fue presentado como un lugar perfectamente preparado para desarrollar todas las actividades de los Juegos. Lamentablemente la candidatura de Sevilla no fue estimada y pasamos enseguida a contemplar la organización de actividades según las capacidades de los pabellones y la organización de un Parque Científico y Tecnológico, que afortunadamente ha sido una historia de éxito. Es llamativo que habitualmente se ignore que hay un fuerte núcleo de actividad, con un museo de arte contemporáneo, facultades universitarias, teatros, servicios de la Administración y más de quinientas empresas y entidades, en concreto 536 empresas e instituciones según la memoria del Parque Tecnológico y Científico de Cartuja de 2020, en todo tipo de sectores, especialmente en tecnologías, con más de 23.000 personas trabajando a diario en el recinto y muchas de ellas piensan más en donde aparcar que en la Expo 92, simplemente porque no habían nacido entonces.
En la actualidad el recinto sigue en desarrollo, aunque falta transporte público y no se han ejecutado los puentes y pasarelas que estaban previstos en el Plan General de Ordenación Urbana vigente, ni por supuesto la Línea 4 del Metro, la circular que se cruzaba con todas las demás y que relacionaba la Cartuja con las principales zonas de la ciudad como Triana, la Macarena por el norte, Nervión por el este y al sur con la Palmera. Se están actualizando algunos edificios como el centro médico y algunos edificios para residencias de estudiantes. La implantación de la Torre Sevilla y el centro comercial está activando el sur del recinto. El Caixa Fórum y el Parque Magallanes, aportan vida, como la prevista nueva sede del Liceo Francés y el Centro Común de Investigación de la Unión Europea.
La Expo 92 nos conmovió durante unos meses como el gran suceso extraordinario que fue, pero ya pasó. En ese sentido es legítimo el sentimiento personal de nostalgia por aquellos días y es encomiable la labor de la asociación Legado Expo. Pero la realidad actual es que falta espacio en los terrenos de la antigua Expo y hay demanda para instalar empresas y organismos. Es razonable pensar en los terrenos del abandonado canal para nuevos usos, pero no de cualquier forma. No lancen titulares y declaraciones sobre el canal. Informen a fondo sobre las opciones. ¿Se acuerdan de lo que significa una exposición pública informativa? El pleno municipal tiene la responsabilidad de decidir, pero los sevillanos tenemos derecho a que nos cuenten lo que se proponen hacer, unos y otros.
También te puede interesar