Los sucesos colman los telediarios

Cada telediario es hogaño como una edición animada de El Caso, cuando entonces popularísimo periódico exclusivamente de sucesos. Más del cincuenta por ciento de los telediarios son ocupados por una sección de sucesos larga, densa, llena de truculencias, de malos tratos, de crímenes horrendos, de homicidios, de fratricidios, de parricidios incomprensibles para una mente normal... ¿Es que ahora pasan más esas cosas que antes? La impresión así, a primera vista, es que nuestra vida está plagada de sucesos, pero todo indica que estas cosas fueron de toda la vida y que lo que es de ahora es el interés por el morbo de unas televisiones que comercializan hasta los telediarios. Todo es audiencia y todo es basura, telediarios incluidos, porque la basura es lo que, por lo visto, más interesa a la clientela. Qué horror.