Sicab sigue pudiendo con el tiempo

Desde el martes y hasta pasado mañana, el Salón Internacional del Caballo, Sicab en el mundo. Lo que hace treintaicuatro años nació con sordina, como a cencerros tapados, es hoy el tercer acontecimiento más rico en pernoctas tras la Semana Santa y la Feria. Aguantó como pudo una maldición como la peste equina, sorteó con solvencia aquella crisis que alguien calificó absurdamente de desaceleración, vio cómo ese familiar cercano que fue la Feria del Toro murió por inanición y he ahí, muy vivo, Sicab. En su historia, los nombres de Luis Ramos Paúl, Antonio Sánchez Bedoya, los hermanos Peralta o Álvaro Domecq entre otros como pilares que sustentaron un edificio que muestra una espléndida solidez. Hasta el domingo, una cita en Fibes con el caballo de raza española en algo que bien merece la pena.