La Ventana
Luis Carlos Peris
El drama de los sin techo
Tremenda la eficacia del boca a boca cuando se trata de ir a la vieja conseja de lo gratis, cueste lo que cueste. Imparables los efectos en lo que empezó como una convidá para los amigos y que se convertiría en una especie de botellona para pijos. Una reunión que arrancó en la intimidad de la casa de Reyes Católicos fue derivando anualmente a una turbamulta de amigos y arrimados que ocupaban la acera de dicha calle en las puertas de Triana. El día fijado para tan generosa invitación era el de hoy, Viernes de Dolores en todos los almanaques de la Cristiandad. Los mejores caldos y las más apetitosas viandas como reclamo para tamaña concurrencia y todo acabó con el fallecimiento del anfitrión hace ya casi veinte años. Era nuestro personaje el madrileño Enrique Fernández Asencio, que Dios tenga en su gloria.
También te puede interesar