Un beso que sustituye al de Rubiales

Pasará a los anales de la misma forma que pasó el de Rubiales a Jenny Hermoso el beso que le dio Ilia Topuria a Su Majestad Juan Carlos I en una silla de ring. Fue en Abu Dabi cuando el hispano-georgiano acababa de prolongar su reinado mundial de la UFC, ese arte a mitad de camino entre el boxeo y la lucha grecorromana. Una especialidad de arte marcial que se traduce como lucha extrema y que tiene en el nacionalizado el máximo exponente en la categoría pluma. Acompañado por una cohorte muy especial en la que figuran personajes como Sergio Ramos y Alejandro Talavante, tras deshacerse de Max Holloway se bajó del ring y, sin encomendarse a Dios ni al diablo, se fue directamente al Emérito para endosarle un beso en la frente, algo sin precedentes, conque ya ha encontrado sustituto el de Rubiales.