EN DIRECTO
JJOO de París 2024 | Judo: Primera medalla para España- Fran Garrigós logra el bronce

Los responsables de las salas teatrales juzgan "ridícula" la ayuda del Ayuntamiento

La Imperdible acoge 'El teatro que viene', una cita en la que este año se otorgarán premios.

B. Ortiz / Sevilla

14 de marzo 2012 - 05:00

Los propietarios de las salas privadas de la ciudad calificaron ayer de "jarro de agua fría" la noticia de que el Ayuntamiento de Sevilla sólo destinará a los teatros 50.000 euros en concepto de ayudas para la actividad. "No se corresponde con el escenario que creíamos que había, que era el de apoyo a iniciativas estables como nuestras salas. Ha costado mucho afianzar esta estructura, y en este tiempo hemos creado un público. Esa cantidad me parece francamente ridícula, y con este planteamiento los teatros están abocados al cierre", opinó José María Roca, responsable del Teatro La Imperdible y presidente de Escenarios de Sevilla, aunque recalcó que hacía sus declaraciones "no en nombre de la asociación, porque aún no hemos podido reunirnos y valorar las novedades". El director teatral añadió que "a ver con qué cara vamos ahora al Ministerio y a la Junta si nuestra propia Corporación nos dio la espalda".

Roca presentó junto a Gonzalo Andino, de la empresa Noletia, centrada en la divulgación de las artes escénicas, el ciclo El teatro que viene, una propuesta que vuelve a contar con el respaldo del Centro de Iniciativas Culturales de la Universidad de Sevilla (Cicus) y que comenzó ayer en el Teatro Imperdible. La habitual muestra ha pasado a convertirse en esta edición en un certamen que otorgará dos premios: el de espectáculo, con una dotación de 1.000 euros y la exhibición de la obra en La Imperdible, y el del montaje más innovador, con 500 euros de galardón y funciones en el auditorio del Cicus. Hasta el día 25 se representan los trabajos de seis compañías procedentes de todo el país. Se puede consultar la programación del certamen teatral en la web.

3 Comentarios
Ver los Comentarios

También te puede interesar

Las ciudades y los libros

Túnez: un delicado equilibrio

Que la fiesta continúe | Crítica

En el amor y el compromiso

Lo último