"Quizá el periodismo sea el género literario del siglo XXI"

"La crónica narra hechos objetivos desde la subjetividad, lo que le confiere un sentido literario innegable", concluyeron ayer el ganador del premio Planeta Fernando Delgado y la fundadora de la revista Tiempo Nativel Preciado, acompañados por el editor y crítico literario Ignacio F. Garmendia, director del seminario El arte de la crónica, dentro del curso La vida más allá de la narrativa, que tiene lugar durante esta semana en la sede de la Universidad Internacional de Andalucía en La Cartuja.

Delgado incidió en la forma en que este subgénero periodístico influye en todos los demás: "Incluso en la jerga cotidiana de un periódico, a los artículos de opinión se les denomina crónicas. No tiene nada de raro, porque en éstos llegan a utilizarse recursos propios de la crónica que generan efectos narrativos, como la referencia de un acontecimiento por comparación." Algo que se encuentra en la misma naturaleza conjunta de los géneros de opinión, según declaró Preciado, antes de mencionar que "los ingredientes de una buena crónica se encuentran en el análisis, la crítica, y el enfoque desde la percepción propia de los hechos". "Quizá por eso", razonó Delgado, "de entre todos los géneros, ninguno pueda suplir la entrevista, especialmente en prensa. Otros medios, como la televisión y la radio, tienen los silencios y otros recursos expresivos, pero en la profundidad de lo que se dice, no podrán competir nunca con el periodístico".

"Cuando la crónica de un corresponsal se convierte en un relato, es maravilloso", continuó el autor de La mirada del otro. "En la interrelación literatura-periodismo, ambos se necesitan cada vez más. Sin embargo, mientras la narrativa convencional tiende a desnaturalizarse, a distanciarse de lo decimonónico, al periodismo le salvan sus formas." Asimismo, el autor señaló su convicción de que "la salvación del periodismo no pasa por trivializar la distribución del periódico: el que no lee tampoco lee los titulares", y añadió que "al periodismo de agencia, de corta y pega, le falta reflexión. Cada vez se plantea en menor medida la responsabilidad que emana de incluir ésta o aquella palabra en el texto".

En referencia a la relación entre los oficios del periodista y el escritor, Nativel Preciado, finalista del premio Planeta en 1999 con su novela El egoísta, se pronunció explicando su caso: "En nuestra generación, la mayoría de quienes nos dedicamos a la prensa lo hemos hecho porque teníamos una profunda vocación literaria, y pensamos que el periodismo era una forma de abrir aquella puerta". Fernando Delgado secundó este proceso desde su experiencia: "Cuando a los 14 años llevé mis escritos a un periódico local, no sabía lo que era un periodista", y continuó: "Hemingway dijo en una ocasión que el periodismo te puede llevar a cualquier parte, siempre que lo dejes a tiempo. El periodismo te llena la cabeza, no sólo en su ejercicio, sino durante el resto del día, y en eso puede haber cierta incompatibilidad con otras formas de escritura." Para concluir, Delgado razonó que "hay quien afirma que el periodismo es el género literario del siglo XXI, y quizá esté en lo cierto: hoy los escritores viven más de su trabajo en la prensa que de sus libros."