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Juan Pedro Martín, ‘Pucho’. Cantante de Vetusta Morla
"Se apaga el carrusel (...) ¿Y qué viene después?", se preguntaba Vetusta Morla en Deséame suerte, uno de los temas que incorporaba Mismo sitio, distinto lugar, el cuarto álbum de la banda madrileña y un disco que hablaba de un momento de transformación. "Sentíamos que necesitábamos cambiar para seguir siendo quienes éramos, para continuar encontrando lo que nos ilusionaba", explicaba el guitarrista Juanma Latorre a este periódico hace un año, cuando la formación preparaba un concierto en Sevilla en el que presentaría su nuevo trabajo.
Ahora, este sexteto regresa a la ciudad el día 25 como cabeza de cartel del próximo Interestelar, una cita por la que pasarán también otras propuestas como las de Fangoria, Rozalén, Tote King o Iván Ferreiro. Y en la que este fenómeno de la música española vuelve con ese proyecto de Mismo sitio, distinto lugar bien madurado. "A medida que va avanzando una gira se va cogiendo robustez", concede Juan Pedro Martín (Madrid, 1979), Pucho, el cantante del grupo, quien adelanta en esta ocasión las claves de su visita a Sevilla. "Y en los festivales, además, ofreces algo más que en las giras. Al ser un marco distinto no te centras sólo en tu último disco: aquí ofreceremos canciones de todas las épocas de la banda", asegura.
¿Muestra Pucho su preferencia por algún tema en concreto de todo ese repertorio? "¡Uf!", exclama el intérprete entre risas. "Es algo que va cambiando, incluso de un concierto a otro. Un día te conmueves con una canción y otro día te ocurre con otra. La música es un catalizador de emociones que no siempre sabes de dónde proceden, que no siempre puedes racionalizar", argumenta, antes de decantarse tímidamente por uno de los cortes de su último álbum, el de Punto sin retorno, "que es cierto que en las últimas actuaciones me ha movido por dentro".
"Si la gente nos escucha porque es la moda, nos pegaremos el batacazo", auguraban los componentes de Vetusta Morla en una entrevista de 2009. "Pues, ya ves, parece que seguimos de moda", declara Pucho una década más tarde, cuando el grupo exhibe un indudable músculo y encadena cifras asombrosas: en junio del año pasado congregó a 38.000 personas en un multitudinario concierto en La Caja Mágica de Madrid por el que recibió el Premio Ondas al mejor espectáculo musical.
"Nosotros hacemos nuestro trabajo, y si es bien recibido, adelante, con más energía y más ganas lo vamos a afrontar", prosigue el cantante, que hace memoria y valora que "la carrera de la banda siempre ha sido de sumar. A lo largo de los años hemos notado cómo nos ha ido oyendo otro tipo de público, cómo el espectro de nuestros espectadores se ampliaba. Es algo maravilloso, y quizás apunte a que algo hemos hecho bien [ríe de nuevo]".
Para Pucho, Mismo sitio, distinto lugar, un proyecto en el que han buscado "nuevos territorios, una nueva sonoridad", contiene "letras más ácidas, aunque los trabajos anteriores ya tenían un humor que quizás no era tan explícito. Y no es un álbum político, pero somos seres sociales y no podemos dejar de mirar nuestro entorno, y eso está presente aquí también", resume.
Las alusiones a la realidad son frecuentes en ese poderoso y aplaudido directo en el que destaca ese despliegue visual en el que se esmeran particularmente desde Vetusta Morla. "Siempre estamos buscando a creadores que puedan acompañar nuestras canciones", comenta Pucho [no es casual que para sus últimos vídeos hayan contado con directores de la talla de Nacho Vigalondo o Fernando Franco]. "Cuando pones en imágenes una composición, su campo semántico se amplía. En la gira nos apoyamos en los audiovisuales de la artista Begoña Arostegui, que son maravillosos". Los Vetusta Morla, que triunfaron el pasado fin de semana en el festival Warm Up de Murcia, vienen dispuestos a cautivar al público del Interestelar.
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