Una comisión tomará las riendas de la SGAE y "depurará responsabilidades"

Cuatro días después del comienzo de la Operación Saga, el presidente de SGAE, Teddy Bautista, fue ratificado ayer en su cargo por la Junta Directiva, aunque su capacidad ejecutiva pasará a una comisión rectora liderada por un profesional externo que investigará a la entidad para "depurar responsabilidades". "Teddy Bautista ni piensa dimitir ni ha sido instado a ello desde la junta directiva", dijo Caco Senante, quien, junto a otros miembros de la cúpula directiva entrante de la SGAE -Víctor Manuel, Ernesto Caballero, Sabino Méndez y Juan Ignacio Alonso-, se agarró a la presunción de inocencia de su todavía presidente.

Imputado por trama societaria en el auto del juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz al haber presuntamente "autorizado, consentido y también impulsado" un desvío de fondos ideado por José Luis Rodríguez Neri, director de la filial digital de SGAE (SDAE), Bautista permanecerá en su cargo, aunque la comisión rectora realizará un informe que decidirá su futuro en la entidad. Sin embargo, Neri sí será apartado de la dirección de la SDAE, según la junta directiva, "sin perjuicio de su derecho a la presunción de inocencia". "El que lo ha tratado de una manera ha sido el juez, no nosotros", espetó Caco Senante, erigido en portavoz, en una rueda de prensa marcada por la tensión, las evasivas y las acusaciones cruzadas con la prensa.

Bautista está sujeto así a la investigación interna y a la supervisión diaria de esta comisión que se constituirá en la misma fecha en la que la cúpula entrante pensaba asumir sus cargos, el próximo día 12.

Será entonces cuando se empiecen a "depurar las responsabilidades en las que se haya podido incurrir en relación con las prácticas seguidas para la contratación en el Departamento de Sistemas e Informática", según explicó la SGAE en un comunicado.

Esta comisión estará formada por cinco socios -cuatro autores y un editor-, además del profesional externo. Y, en conversación con Efe, Víctor Manuel negó que se sepa ya quiénes la conformarán, pues son los cuatro colegios que agrupan a los socios de la SGAE (pequeño derecho, gran derecho, dramáticos y editores), representados en la junta directiva, los que los tienen que elegir.

Los cinco miembros de la cúpula también se defendieron de las sospechas de legitimidad sobre las elecciones realizadas el 30 de junio, en las que ellos resultaron vencedores con un 57% de los votos, ya que el auto del juez Ruz apuntaba una "obstaculización" por parte de Neri en la concesión de avales para las candidaturas de oposición. Víctor Manuel consideró "absolutamente legítima" su victoria y "una burla a los socios repetir las elecciones", si bien desde la candidatura de la oposición, DOM, liderada por Fernández-Sastrón, se ha convocado para hoy una rueda de prensa en la que pedirán la anulación de las elecciones y que no se constituya la comisión rectora.

Como apuntó la junta directiva, la comisión rectora también investigará los "desfases económicos". "Lo que tenemos seguro es que 400 millones no son. Son cifras tan desproporcionadas que rozan lo irreal", valoró Senante. Cuestionado por la forma en que la entidad fiscaliza sus cuentas, Senante aseguró que esto se hace "con los procesos normales, pero no son expertos en todas las materias" y "si no vemos ningún indicio de algo que esté mal, se van aprobando las cosas". Para Víctor Manuel, existe una "mano negra" y "muchísimo humo" en este caso.

En cualquier caso, el presunto jefe de la trama económica de la SGAE, José Luis Rodríguez Neri, y el socio director de Microgénesis -una de las empresas clave en el entramado- Rafael Ramos, comparten celda en la cárcel madrileña de Soto del Real. Ambos ingresaron en la noche del lunes en el citado centro penitenciario después de prestar declaración ante el juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz, que decretó prisión eludible con una fianza de 300.000 euros para Neri y de 150.000 euros para Ramos. Les acusa de varios delitos como apropiación indebida y administración fraudulenta.