Burlas y veras con el Amor

VANDALIA | CRÍTICA

Vandalia con el arpista Manuel Vilas en la Sala Turina. / AMM
Andrés Moreno Mengíbar

23 de febrero 2020 - 22:06

La ficha

***** Programa: Selección de tonos humanos del Cancionero de la Sablonara. Solistas vocales: Rocío de Frutos (soprano), Gabriel Díaz (alto), Víctor Sordo (tenor) y Javier Cuevas (bajo). Arpa: Manuel Vilas. Lugar: Sala Turina. Fecha: Domingo, 23 de febrero. Aforo: Un tercio.

El Siglo de Oro español fue capaz de tomar el tópico del amor platónico renacentista y elevarlo a su máxima expresión poética (los sonetos de Quevedo, por ejemplo), pero también de bajarlo al mundanal terreno de los celos y de las burlas, de los engaños que acaban en cornamenta (la letrilla de Góngora sobre Gil y el Sotillo) o en desengaño absoluto y renuncia al amor.

De toda esta paleta de materializaciones poéticas de los afectos amorosos hay buena muestra en el Cancionero de la Sablonara, la recopilación de los mejores tonos humanos que se cantaban en la Corte madrileña en el primer cuarto del siglo XVII y que ha sido objeto de la última producción discográfica del coro sevillano Vandalia, una selección de la cual se presentó en la Sala Turina. El grupo, con la colaboración esencial de un especialista en este género como Manuel Vilas (fantásticas sus intervenciones), ha realizado un profundo estudio de las posibilidades expresivas de estas músicas, partiendo siempre de la clara articulación que permite seguir de oído los potentes y bellos textos y del respeto a la integridad de los mismos. Para poder repetir todas las coplas con la misma melodía es necesario dotar a cada una de ellas de un matiz, de una acentuación diferencial, de un juego con las dinámicas, apianando aquí (final de Desiertos campos, por ejemplo), fortaleciendo el sonido allá (sobre la palabra “potencia” o sobre el repetido “¡No!” de Amor, no me engañarás), reteniendo sutilmente el tempo sobre la palabra “dolor” o acelerándolo en “veloz”.

Y todo ello sobre la base de un sonido empastado sin renunciar al color individual.

No hay comentarios

Ver los Comentarios

También te puede interesar

ROSS. Gran Sinfónico 4 | Crítica

La ROSS arde y vibra con Prokófiev

Lo último