Las librerías Panella, Yerma e Isla de Papel cierran de forma "inesperada"
LIBROS
Los profesionales señalan que la Administración Pública no fomenta la lectura y que las subvenciones no llegan en tiempo y forma
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Las históricas librerías Panella y Yerma echan el cierre. A estos dos comercios que llevan una larga andadura en la capital hispalense, el primero con 45 años de historia y el segundo con 30, se suma también Isla de Papel, que abrió sus puertas hace seis años. Así lo ha confirmado a este periódico Manuel Padilla, presidente de la Asociación del Gremio de Librerías de Sevilla y Provincia, quien ha recalcado que se ha producido de manera "inesperada" y que, aunque "la situación en Sevilla no sea muy boyante", tanto Panella como Yerma eran dos negocios históricos.
El cierre puede deberse, según ha manifestado Manuel Padilla, a diferentes factores: "La gentrificación del centro, el precio de los alquileres de las librerías, la falta de fomento de las administraciones públicas, las dificultades para acceder a los concursos públicos o que las ayudas llegan tarde".
En el caso de Panella, la librería se ubicaba en Los Remedios, concretamente en la calle Virgen de África. Por su parte, Yerma residía en Viapol, cerca de las facultades de Psicología y de Ciencias Económicas y Empresariales. La más joven, Isla de Papel, estaba enclavada en la Puerta Osario. "Es cierto que las ventas han bajado", confirma Manuel Padilla y que durante el año debería de haber una venta constante de libros, no solo en momentos puntuales como durante la Feria del Libro, pero estos cierres han sido como un "jarro de agua fría" para el sector.
Las reivindicaciones del sector
Manuel Padilla ha emitido además un comunicado, en nombre de la Asociación, en el que ha apostillado que "no se entiende que las Administraciones Públicas no cumplan con su propia obligación de fomentar la lectura; no se entiende que las subvenciones no lleguen en tiempo y forma; no se entiende que se premie el intrusismo laboral; no se entiende que los sindicatos mayoritarios crean que las librerías se estén enriqueciendo", o que "no se conozcan los bajos márgenes comerciales con los que se trabaja".
Además, ha señalado que "nos encontramos en un momento histórico donde las sociedades están experimentando un retroceso en valores tan básicos como el respeto al prójimo".
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