Manolito Gafotas vuelve al 'mundo mundial'

Manolito Gafotas ha tenido una hermanita, una pequeña que por sus rizos fue rebautizada Chirli en homenaje a Shirley Temple y que a sus tres años de vida interpreta con convicción temas de Lady Gaga y Kilye Minogue. El otro hermano, El Imbécil, ha crecido y es considerado un genio de la informática tras arreglar, con siete años, un ordenador viejo. Todos auguran que la nueva Shirley Temple acabará en Hollywood, que el nuevo Steve Jobs se instalará en Silicon Valley, pero en lo concerniente a Manolito "a nadie se le ocurre qué decir cuando se habla de mi futuro". Con esta incertidumbre regresa el célebre personaje creado por Elvira Lindo en Mejor Manolo (Seix Barral), un libro que su autora presentó ayer en Sevilla en el ciclo Letras capitales del Centro Andaluz de las Letras.

El propio Manolito se pregunta la razón por la que Lindo vuelve a escribir sobre él una década después de su última aventura. ¿Necesidad de dinero fresco? ¿Añoranza de los viejos tiempos? La autora se justifica en persona: "No, no, por dinero no era, claro", afirma desmontando una tesis que parecía poco probable dado el éxito que han tenido obras suyas como Una palabra tuya o Lo que me queda por vivir. "Y por nostalgia tampoco. Siempre pensaba que en algún momento volvería". Cree que el tiempo ha beneficiado a los personajes: "Les han pasado más cosas y son más completos. Este paréntesis ha servido para dibujarlos mejor". La narradora no era la única que deseaba prolongar la vida literaria de Manolito: asegura que "no ha habido una semana en que los lectores no me lo hayan pedido. Hay una especie de reivindicación generacional con Manolito, niños que crecieron como lectores con él y que ahora tienen 20 años".

En Mejor Manolo, el protagonista anda aún en la preadolescencia y conserva ese estado entre "la inocencia y la perspicacia", una definición del chaval que hizo su traductora al inglés y que agrada particularmente a Lindo. "Retratarlo con 16 años habría supuesto quitarle esa inocencia", advierte la escritora, que reconoce no tener claro si algún día se atreverá a contar la vida de un Manolito ya adulto. "Los cantantes de ópera tienen cerrada su agenda hasta el 2023, pero yo no funciono igual: atiendo mis impulsos creativos, ahora ando en otros proyectos".

Aunque Manolito ha logrado repercusión, como él diría, en el mundo mundial, y es un fenómeno incluso en territorio iraní -"hay aspectos en los que se reconocen, allí también tienen mucho apego a la familia", aclara Lindo-, en la traslación de las peripecias del personaje a otras culturas se han suavizado algunos detalles, como las famosas collejas que la madre propina al crío. "La sobreprotección que tienen en algunos países con la infancia ha obligado a ello. Es paradójico que en sitios como Estados Unidos no se controle la venta de armas y sí los libros, que sean jueces tan feroces con algo que no hace daño". Norteamérica, y más concretamente Nueva York, será el escenario del próximo proyecto de Lindo, La vida inesperada, un guión suyo que dirigirá Jorge Torregrossa (Fin) y que interpretarán Javier Cámara y Raúl Arévalo. "Antes escribía el guión y se acababa, pero esta vez voy a involucrarme mucho más. Con la crisis nos tenemos que ayudar los unos a los otros para sacar un proyecto".