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Flamenco

Miguel Poveda adapta en su nuevo disco, 'Enlorquecido', poemas de la última etapa del escritor granadino

Miguel Poveda, durante una actuación reciente. / Javier Albiñana
Juan Vergillos

04 de junio 2018 - 07:54

La ficha

'Enlorquecido'. Miguel Poveda. Prod. Joan Albert Amargós. Concert Music/Carta Blanca.

Siguiendo la línea de su entrega anterior, Para la libertad (2015), y en la estela de maestros como Morente o Camarón, Miguel Poveda ha puesto música a unos versos que no fueron concebidos para ser cantados. Algunos escritos en la forma de verso libre, como la Fábula y rueda de los tres amigos que Poveda ha trasformado en una canción, con estribillo y todo, titulada No me encontraron, con la que abre este disco. También de Poeta en Nueva York (1929-30), como Grito hacia Roma: el mensaje de Lorca está de plena actualidad. Por eso Poveda ha contado con un coro de niños refugiados para cantar el estribillo. Los otros dos textos seleccionados de Poeta en Nueva York se alejan de la temática principal del libro: son la Oda a Walt Whitman, sobre el homoerotismo, y Son de negros en Cuba,que relata la huida del poeta del maquinismo y el inglés. Ninguno de estos temas fue tratado por Morente en Omega, su disco sobre Poeta en Nueva York, aunque Son de negros en Cuba cuenta con una versión previa de La Barbería del Sur. En la misma línea se hace acompañar Poveda aquí de un combo sonero liderado por Alain Pérez, coautor de la música y que da la réplica vocal al cantaor, además de tocar el tres.

La versión musical de estos poemas es puramente flamenca: en la voz de Poveda, en el uso de la cadencia andaluza. Pero se alimenta también del rock progresivo de los 70 en guitarras eléctricas y estribillos, en la percusión. Es decir, Poveda ha optado por una solución musical más convencional que la que alimentó a Lorca en su creación de este magno poemario, absolutamente revolucionario y necesario, tan surrealista como lúcido en su desesperación y denuncia. Como saben, Morente optó por una formación de rock duro para hacer músicas de estos poemas.

El cantaor firma, por vez primera, todas las músicas de su nueva entrega discográfica

Aunque escrito también en Estados Unidos, la Canción de la muerte pequeña no pertenece a la vena de denuncia del libro mencionado, sino que Lorca pensaba incluirlo en Tierra y luna, y así figura en sus Obras completas. Poveda ha elegido el ritmo de soleá para musicar este poema, con el solo acompañamiento del guitarrista Jesús Guerrero. El texto de desamor Alba, del Libro de poemas (1921) es una de las pocas obras juveniles de Lorca que Poveda ha seleccionado para este disco. Es una balada íntima, con arreglos de cuerda a cargo de Joan Albert Amargós, productor del disco. Del Poema del cante jondo, (1931, aunque escrito en 1921), ha seleccionado El silencio convertido en un tema lírico e impresionista, de brillantes arreglos orquestales.

De una carta de 1922 escrita en Fuentevaqueros al guitarrista Regino Sainz de la Maza, dedicatario de varios poemas de Federico García Lorca, ha seleccionado el cantaor un texto muy poético, como no podía ser menos.

En Para la libertad ya había cantado Poveda dos de los bellísimos Sonetos del amor oscuro (1934-36) a los que suma ahora otros dos poemas. Ay, voz secreta es una rumba fresca que se aleja del grave contenido del texto. Más íntimo resulta El amor duerme en el pecho del poeta con el acompañamiento del piano de Amargós. Imposible no recordar las versiones maestras que de estos dos poemas llevó a cabo Amancio Prada.

El disco se completa con una selección de las famosas Canciones populares que Lorca grabó en 1931 con La Argentinita. Se reproduce en esta edición, de hecho, un fragmento de la Nana de Sevilla original con el poeta al piano.

Aunque ya había hecho sus pinitos como compositor en discos anteriores, ésta es la primera vez que Poveda firma al completo la música de una de sus obras. Y es que la inspiración lorquiana, según cuenta el propio cantaor, ha ido más allá de la letra del poeta: hacia sus pinturas, sus grabaciones, sus imágenes, los paisajes que lo contemplaron y su propia biografía. Como afirma el poeta en la mencionada carta, hay muchos Federicos García Lorca. Uno de ellos es el de Miguel Poveda. Porque la biografía de Lorca es también la nuestra. Al menos hasta que sus huesos no reposen en sagrado, como el de Fuentevaqueros hubiese deseado. Miguel Poveda presentará Enlorquecido el próximo día 22 en el Auditorio Rocío Jurado de Sevilla. El 7 de julio estará en el Teatro de la Axerquía de Córdoba.

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