El Lope funde el jazz y el cómic en 'Concierto en viñetas'
El Black Tulip Jazz Quartet y una decena de dibujantes llevan a escena mañana su historietal Concierto en viñetas. Teatro Lope de Vega, mañana a las 21:00. Entradas disponibles de 3 a 12 euros.
El Black Tulip Jazz Quartet y una decena de dibujantes protagonizarán Concierto en viñetas (mañana, a las 21:00, en el Lope de Vega), actividad derivada del Encuentro del Cómic y la Ilustración de Sevilla. En sus 10 años de andadura, el encuentro ha contribuido sin duda al fortalecimiento del mundo del cómic en Andalucía, así como a su proyección, propiciada mediante la implicación en sus actividades de artistas, músicos e instituciones ajenos al ámbito exclusivo de la ilustración. En este Concierto en viñetas se propone la colaboración de una decena de ilustradores sevillanos o asentados en este ámbito -Javier Garrón, Pedro Alpera, Rafael Iglesias, Antonio Hitos, Alberto Rico, Abel Ippólito, Irene Rodríguez, José Luis Ágreda, Guillermo, Pablo Velarde y Carlos Pacheco-, que sobre la marcha darán vida a una historieta, y el Black Tulip Jazz Quartet, que el percusionista Sancho Campos (Sevilla, 1976) ha reunido para la ocasión. Completan el cuarteto, que en febrero entrará en el estudio de grabación, el saxofonista de origen austriaco Werner Tucek, Eduardo Camacho -pianista de formación clásica que ha probado su versatilidad en agrupaciones tan dispares como Mutación o Los Infusos-, Riki Candela al contrabajo y, como invitado, el guitarrista Amaranto. Sancho Campos combina su pasión por el jazz y sus orígenes -que ha rastreado en sus viajes por Norteamérica y ha aprendido de mentores como Andrew Cyrille o Mark Dresser- con una inagotable curiosidad sonora que lo conduce de Max Roach a la música vietnamita y de allí a las últimas andanadas de Zach Hill...
Tanto el jazz como el cómic se han prestado, desde sus inicios, a esta suerte de enriquecedoras simbiosis con otras disciplinas artísticas. Pero si dibujantes y jazzmen son herederos de vastas tradiciones, uno de sus rasgos más característicos -y que más aproximan los ámbitos del cómic y el jazz- es su dominio de la inmediatez y la espontaneidad. Por eso, este concierto y su ilustración, esta historieta y su banda sonora prometen ser únicos y, por eso, altamente recomendables.
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